El aumento del trabajo en remoto es una de las muchas consecuencias que ha dejado la crisis sanitaria que lleva afectando a nuestras vidas desde marzo del año pasado.
Muchas son las personas que han tenido que dejar de lado la oficina y pasar a trabajar desde casa, combinando vida laboral y vida familiar de forma literal. Del mismo modo, las empresas han tenido que ponerle el “turbo” a la aceleración tecnológica para que esta realidad fuese posible.
Pasado todo un año, ha dado tiempo a reflexionar sobre nuestra percepción de esta modalidad y, eso es precisamente lo que han hecho varios estudios en los que se intentan abordar los aprendizajes del trabajo en remoto.
A continuación, se recogen las principales conclusiones.
1. En casa somos más productivos
Según Okta, el 62% de los encuestados ven el aumento de flexibilidad horaria como un impulsor de la productividad, ayudándolos a mantener el foco durante su jornada laboral; el 55% dijo que el aumento de productividad se derivaba del tiempo libre adicional que les proporcionaba el teletrabajo.
Por otro lado, el 24% de los trabajadores indicaron que sus empresas no les proporcionaban el software apropiado, sobre todo al inicio de la pandemia, lo que afectaba negativamente a sus niveles de producción.
2. Nos encanta teletrabajar
Parece que el trabajo en remoto seguirá presente incluso tras la desaparición del Covid-19 y volver a la oficina sea seguro: tan solo el 24% de trabajadores ingleses quieren volver a su antiguo escritorio y un 35% quiere una modalidad combinada en la que la mayoría de horas se hagan en remoto, pero otras sean presenciales.
3. Aunque trabajamos más horas
Trabajar desde casa hace que nuestras jornadas laborales se alarguen una media de 3h, lo que puede provocar cansancio y estrés por sobrecarga.
Muchos trabajadores no saben cuándo parar y trabajar en la oficina con un horario establecido marcaba los límites de manera tangible, hecho que desde casa no es posible o es más difícil.
Debemos aprender a establecer prioridades y no trabajar más de la cuenta, o el porcentaje de empleados con síndrome de burnout podría subir drásticamente.
4. Echamos de menos a nuestros compañeros
A pesar del éxito del teletrabajo, lo cierto es que ir a la oficina también tiene sus ventajas, especialmente las referentes a las relaciones interpersonales.
El 57% de los encuestados europeos echa de menos ver en persona a sus compañeros y charlar con ellos; el 49% extraña las alianzas que se han ido forjando en su trayectoria profesional.
5. No todos podemos teletrabajar
Un estudio de la Universidad de Chicago deja entrever que no todos los países son capaces de movilizar su fuerza de trabajo y solo aquellos con un PIB per cápita alto lo puede hacer de forma óptima: cuanto más baja la economía de un país, menos trabajos con posibilidad de realizarse de forma remota hay.
Esta variabilidad también se aplica entre sectores, siendo los más beneficiados la educación y las profesiones científicas y tecnológicas.
6. Nuestra salud y bienestar han mejorado
Algunos estudios indican que el hecho de no tener que hacer viajes de casa al trabajo y viceversa o darse prisa en preparar el almuerzo todos los días sin llegar tarde, disminuyen los niveles de estrés, lo que influye positivamente en nuestro bienestar.
Por otro lado, tener la posibilidad de comer en casa platos caseros recién hechos nos ofrece opciones naturales y saludables que contribuyen a mejorar nuestra salud.
7. La comunicación con los trabajadores es fundamental
Durante la pandemia muchos líderes han aprendido que es posible trabajar con su equipo desde casa, concretamente un 55% de ellos han cambiado su percepción del trabajo en remoto según una encuesta de Gallup.
Para la gestión de equipos en remoto, la comunicación y conocimiento del estado de los empleados es fundamental: el objetivo es que todos los trabajadores se sientan escuchados, cómodos y pertenecientes a la organización.
Para lograrlo, existen herramientas virtuales capaces de monitorear en tiempo real el estado de la plantilla, sin importar el tamaño de la organización.
Es el caso de Team Insights, un software que con su novedosa y potente tecnología T-Engine ofrece la posibilidad de saber cómo se encuentra tu equipo en todo momento y con total confidencialidad.
Team Insights es una herramienta eficaz en la gestión de personas, que te ayuda a mejorar la experiencia del empleado y crear el mejor lugar para trabajar, ¡incluso en remoto!
En conclusión, todo parece indicar que el trabajo en remoto ha llegado para quedarse, ya sea en su totalidad o en un modelo híbrido. Contamos con los recursos y las herramientas necesarias para hacerlo posible, y este año ha servido para despejar dudas y mitos sobre la falta de eficacia y productividad.
El futuro es tecnológico, y el trabajo en remoto es la “nueva normalidad”.
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