La Secretaría de Acción Sindical de CCOO ha publicado un estudio sobre la primera Encuesta Anual Laboral (EAL) realizada por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en el que se demuestra que la reforma laboral de 2012 «no ha sido positiva en ninguno de sus grandes objetivos».
Según este estudio de CCOO, realizado por el economista Manuel Lago, «queda claro» el fracaso de la reforma laboral. El informe indica que la reforma no ha servido para que las empresas aplicaran medidas de flexibilidad interna ante caídas en su nivel de actividad, sino que han recurrido a ajustes del empleo.
De acuerdo con CCOO, los resultados de la EAL confirman las críticas del movimiento sindical hacia la reforma laboral, ya que el Gobierno «facilitó la vía de ajuste a través del despido» y «dejó en manos de las empresas» el poder de decisión para aplicarlo, ante lo que estas optaron «por la vía más fácil y rápida: reducir sus plantillas».
Como resultado, según CCOO se ha producido «una mayor destrucción de empleo» de la que se hubiera producido si se hubiera aplicado un modelo «más equilibrado» en el reparto de los costes de la crisis entre el trabajo y el capital.
Para el sindicato, «lo peor» es que la EAL señala que este modelo de ajuste vía empleo es el que aplicarían las empresas en caso de una nueva recesión. Por ello, si no se deroga la actual normativa laboral, España volvería a destruir empleo «con gran intensidad y rapidez» ante cualquier caída en la actividad productiva de las empresas, advierte CCOO.
De acuerdo con la EAL, solamente el 6% de las empresas han aplicado de forma exclusiva medidas de reordenación interna (salarial o de jornada), frente al 39% que utilizó exclusivamente el ajusto duro, los despidos y la no renovación de contratos temporales.
Para CCOO, esto refleja que las empresas han utilizado la vía del despido para sus ajustes en base a una reforma laboral «que anuló los mecanismos que habían pactado las empresas y sindicatos en el AENC» con el objetivo de utilizar «de forma preferente» las medidas de flexibilidad interna. La EAL «es un intento de avalar la reforma», según la organización sindical.
Además, la EAL revela que el 98% de las empresas tiene reguladas sus relaciones laborales con convenios colectivos, frente a la «falsa idea extendida en 2013» de que la cobertura de la negociación colectiva estaba en declive y se había reducido notablemente el número de trabajadores con convenio.
CCOO señala que en la justificación de la reforma se insistía en la necesidad de descentralizar la negociación para acercarla a las necesidades de las empresas, pero, según la EAL, la mayoría de las empresas están cómodas con el modelo de negociación colectiva en el que predomina el ámbito sectorial. De hecho, 82% de las empresas están reguladas por un convenio de sector y el 81% dice que no necesita convenio de empresa porque el sectorial se adapta mucho o bastante a sus necesidades.
Asimismo, CCOO indica que la EAL revela un fracaso del cambio de modelo de ajuste de las empresas ante la caída de ventas, ya que un 67% de las empresas optaría en ese caso por reducir costes laborales y despidiría a trabajadores temporales en primer lugar. Para CCOO, esto demuestra que la variable de ajuste sigue siendo el empleo, en especial el eventual.
Según la EAL, el 68% de las empresas contrataría eventuales y un 12% aumentaría las horas de trabajo o la subcontratación, mientras que solamente un 19% de empresas contrataría de forma indefinida.
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