Más de dos años después de la irrupción de la pandemia, el mundo sigue en constante cambio. En el ámbito laboral, el teletrabajo -en la mayoría de los sectores- llegó para quedarse, cambiando la movilidad de muchos de manera irreversible.
Según la última Encuesta sobre el uso de TIC y del comercio electrónico en las empresas del INE (Instituto Nacional de Estadística), el 40,8% de las empresas permiten el teletrabajo. También, 8 de cada 10 de ellas usan ya tecnologías de acceso remoto para su personal, lo que indica que su implantación podría crecer.
“En España, la mayoría de los desplazamientos diarios, con diferencia, se producen con motivo laboral. Más de la mitad de los mismos se llevan a cabo con transporte privado, por lo que no es de extrañar que cambios como el teletrabajo tengan un impacto directo en la movilidad cotidiana”, explica Eduardo Clavijo, CEO del marketplace Idoneo.com.
Así, tal y como recoge el Estudio ISTAS-CCOO de 2016 -el último realizado sobre movilidad en ámbito estatal-, el gasto medio que supone utilizar un vehículo privado en propiedad para ir trabajo cada día asciende hasta los 2.376 euros anuales: “Por lo tanto, si se normaliza el teletrabajo y hubiera que acudir únicamente dos días a la oficina por semana, los conductores podrían ahorrar hasta 130 euros de media al mes, o lo que es lo mismo, 1.430 euros al año”.
Esta estimación podría quedarse corta ante la situación actual en la que el precio del combustible es hasta un 76% más caro que en 2016. Además, la subida de impuestos al automóvil y la inflación de los últimos meses ha provocado que el precio de los automóviles sea un 35% mayor que hace 5 años, según la OCU.
Renting como oportunidad para el teletrabajo y solución ante la inflación
En este nuevo contexto, la compra del automóvil pierde atractivo porque, según Clavijo, “para muchos no tiene sentido realizar una gran inversión en un bien que cada vez es más caro y usan menos.”
Al mismo tiempo, el experto señala al renting como “la alternativa real” para los ciudadanos que han visto reducida su presencia en la oficina por el teletrabajo, pues un modelo de pago por uso ofrece grandes ventajas sobre la compra de un coche.
El renting permite a los conductores adecuar lo que pagan por su vehículo en función del uso que hacen de él siendo el kilometraje anual el principal factor que determina el precio de este alquiler. “Muchos trabajadores recorren la mitad de los kilómetros que antes de la pandemia, lo que hace para ellos aún más interesante el renting, pues al realizar un uso menor del coche, pagarán menos por él”, apunta Clavijo. Por el contrario,”si adquieren el vehículo en propiedad, aunque este pase todo el día aparcado, soportará la devaluación del vehículo igualmente, sufriendo ellos todos los riesgos que conlleva la compra.”
Pese a que las subidas de precio han llegado también al mercado del renting, sin embargo, su impacto, según detalla el experto, ha sido menor. “Nuestro sector ha demostrado su resiliencia por la capacidad de permitir el acceso a un coche sin grandes desembolsos, algo muy valorado en los tiempos de incertidumbre por gran parte de la población”, concluye.