La pandemia del coronavirus ha cambiado la visión que se tenía del teletrabajo. En 2020 tomó impulso cuando las empresas tuvieron que implementarlo debido a las restricciones, y aunque en septiembre algunos trabajadores volvieron a la oficina, muchos expertos coinciden en que el presencialismo ya es algo del pasado.
De hecho, dos estudios recientes, uno publicado en la revista de investigación Harvard Business Review, y otro llevado a cabo por la consultora de recursos humanos Grupo Adecco, concluyen que vamos camino de una nueva cultura del trabajo en remoto. Según los análisis, la jornada mixta o el modelo laboral híbrido favorece la creatividad y productividad en el trabajo en equipo.
En pfs tienen esta idea bien clara: el teletrabajo no es el futuro, sino el presente. Por lo tanto, tras la llegada del coronavirus, dieron impulso al programa Efficient Work, para que sus más de 500 empleados tengan horarios flexibles y puedan trabajar desde donde quieran. Y con la visión, también, de externalizar este modelo a otras compañías.
Este sistema de trabajo, el eWork, es una evolución de la metodología de pfs, una firma centrada en llevar, a través de la aplicación de sus soluciones tecnológicas y el talento especializado, una transformación eficiente a las empresas de cualquier sector.
Este modelo de trabajo, que ya forma parte de la propiedad intelectual de la compañía, está basado en la flexibilidad y la confianza, por eso consideran que no es necesario ir a la oficina para ser más eficientes, sino que cada persona puede decidir cuál es su puesto de trabajo en función de sus necesidades y tareas a desempeñar en cada momento, individuales o de equipo.
Los trabajadores, los eWorkers, son el centro del modelo: desde los líderes que lo implantan y los equipos, hasta el nuevo talento que aprende de sus valores. El seguimiento de los objetivos se hace mediante reuniones de uno a uno semanal y mensualmente, apoyándose en la herramienta eWork, desarrollada también por pfs, que ayuda a organizarse, reflexionar y comprometerse con el cumplimiento de los objetivos acordados entre coordinador y colaborador.
Las oficinas de pfs se han transformado en un punto de encuentro donde trabajar en equipo y colaborar con otros compañeros, bien sea en presencial o en remoto. No hay espacios asignados, salvo excepciones, sino que estarán disponibles para tod@s, previa reserva. Además, se han flexibilizado por completo los horarios de entrada o salida.
Como explica el director corporativo de pfs, José Luis Esteve, este sistema de trabajo, «mejora su conciliación familiar y profesional. Y además, ahorra costes mensuales de transporte y reduce los riesgos del desplazamiento y el estrés de los atascos«.
Por otro lado, ayuda a reducir los problemas de circulación, los accidentes de tráfico y la contaminación. Y contribuye a reducir la desigualdad laboral, promoviendo la inclusión de profesionales de todos los colectivos, añade.
Hasta la fecha los resultados están siendo «muy positivos», ya que según Esteve, «han conseguido ser más efectivos y operativos en las tareas, además de eliminar las barreras para captar y retener talento«. El eWork les hace más eficientes y consigue potenciar su crecimiento.
Los comentarios están cerrados.