Más de 50.000 profesionales españoles de distintas empresas y sectores ya han realizado el curso de GoodHabitz para combatir el burnout o síndrome del trabajador quemado. La compañía, creadora del método que ha revolucionado el e-learning corporativo y líder europeo en online learning, incorporó en enero esta nueva formación para ayudar a identificar y prevenir uno de los fenómenos ocupacionales del siglo XXI, reconocido el pasado año por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los hábitos individuales y colectivos se han visto alterados de forma muy agresiva en el último año. Sin recursos adecuados para aliviar el alto nivel de incertidumbre al que las empresas y trabajadores se ven sometidos, es difícil mantener el desempeño de cualquier rol sin cambios significativos, al margen del nivel de responsabilidad o función en la estructura empresarial.
«Aunque ya estaba presente en el mundo laboral, este fenómeno se ha disparado de forma alarmante a causa del trabajo en remoto y todos los cambios derivados de las limitaciones impuestas por la pandemia. GoodHabitz detectó claramente la necesidad de aportar recursos para ayudar a prevenir y combatir el “burnout”», señala Roel Koppens, Director General de GoodHabitz en España y Portugal.
Con este propósito GoodHabitz incorporó el pasado mes de enero esta nueva formación ad-hoc. En poco más de dos meses más de 50.000 profesionales, en muy diversos sectores de actividad, han accedido a la información y recursos con los que la revolucionaria plataforma de e-learning quiere contribuir a paliar el impacto que el teletrabajo, el llamado reboarding o el regreso al puesto físico de trabajo (igualmente generador de estrés) pueden estar causando en empleados, managers y directivos de empresas.
En una situación tan excepcional, GoodHabitz actualiza su oferta formativa para facilitar a trabajadores y empresa los medios para identificar debilidades, prevenir consecuencias y potenciar las fortalezas de los equipos. Con el foco puesto en el acompañamiento y no en el paternalismo, incorpora herramientas para una nueva cultura empresarial.
«Todos sabemos que el absentismo y la disminución del rendimiento repercuten directamente en los resultados económicos de la empresa, pero también en su imagen y reputación», recuerda Koppens. «En el universo digital, no podemos olvidarlo, hay tangibles e intangibles que medir», añade.
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