¿Sabías que hacia finales de esta década, aproximadamente el 85% de las interacciones con los clientes se llevarán a cabo sin necesidad de intervención humana?
Se prevé que la automatización del análisis de medios sociales, el uso de software de gestión de relaciones con los clientes (CRM) y la implementación de chatbots personalizados con reconocimiento de voz y rostro reducirán de manera significativa la dependencia de los tradicionales centros de llamadas. Este cambio nos lleva a considerar la relación entre la Inteligencia Artificial y el empleo.
La evolución de la tecnología de Inteligencia Artificial está transformando rápidamente la composición de la fuerza laboral actual, lo que impacta considerablemente en las habilidades requeridas para el futuro.
La inteligencia artificial definitivamente ha llegado para quedarse y, para las mentes más pesimistas puede resultar terrorífico, generandomiedos y sospechas por parte de las organizaciones. ¿Verdaderamente la IA va a quitarnos el trabajo? Existen diferentes puntos de vista, los más optimistas y los más pesimistas.
Los expertos en tecnología se mantienen firmes: renovarse o morir. Las organizaciones tienen que adaptarse y abrazar estos nuevos cambios y dejarse llevar, de lo contrario se quedarán atrás y obsoletos. Los expertos sugieren que, en lugar de eliminar empleos completos, la nueva ola de automatización podría afectar principalmente a tareas específicas dentro de los trabajos. Esto debería conllevar un cambio en la naturaleza de los empleos y la creación de nuevas tareas adaptadas a la tecnología. La idea fundamental es que la inteligencia artificial no sustituya al trabajo humano, sino que lo complemente.
Un estudio reciente del McKinsey Global Institute, enfocado a la población de Estados Unidos, indica que casi un tercio de las horas trabajadas en el país podrían automatizarse en los próximos siete años. Es decir, en 2030, aproximadamente 12 millones de personas tendrían que cambiar de empleo, por falta de demanda o por el impacto directo de la Inteligencia Artificial.
¿Corren más peligro los puestos ocupados por mujeres?
El estudio recientemente mencionado también señala que más mujeres que hombres podrían perder su empleo a finales de esta década a causa de esta evidente e incontrolable automatización de los puestos de trabajo.
Esta revolución tecnológica afectará de lleno a los sectores productivos, tales como la atención al cliente, la alimentación, el apoyo de oficina, venta al por menor… perfiles que, mayormente, son ocupados por mujeres. Puestos que, de mantenerse el auge tecnológico, pueden ser fácilmente sustituidos por sistemas informáticos, IA o software.
Los puestos STEM son puestos puramente masculinos que, a lo largo de la historia, se han asociado directamente con el hombre. La educación influye muchísimo, por lo que sería un buen punto de partida para comenzar a ejecutar el posible y necesario cambio. Incitar a las generaciones más jóvenes a sentir el interés por el sector tecnológico y dejar de lado los prejuicios es fundamental a la hora de dar un paso hacia adelante y eliminar barreras y sesgos de género.
Además, formarse y adquirir nuevas competencias en el ámbito de las profesiones STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) será indispensable no solo para mujeres, sino también para hombres.
Diversos estudios señalan también señalan que los trabajadores con los salarios más bajos serán los más vulnerables de verse afectados por esta transformación del modelo económico actual.
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