La automatización industrial vive una nueva revolución que viene a reinventar los puestos de trabajo del sector. «A pesar de lo que se cree, cada avance tecnológico es generador de empleo en el campo industrial. La robótica ampliamente extendida en las áreas de automoción, química o manufactura, ha ayudado a mejorar procesos y ha permitido el crecimiento y la expansión de un gran número de organizaciones, lo que deriva directamente en más empleo y de mejor calidad”, declara Ignacio López, Senior Manager en la división de búsqueda y selección de perfiles de ingeniería de Robert Walters.
Qué esperar de las nuevas tecnologías
Numerosos dispositivos robóticos ya tienen integrada la inteligencia artificial para la mejora de los procesos industriales. Por ejemplo, en una cadena de montaje, la IA es capaz de analizar y tomar decisiones antes incluso de que se produzca un problema o imprevisto. Debido a ello, esta tecnología es una aliada perfecta en materia de seguridad en la industria.
Además, la IA no solo es capaz de ayudar en la fabricación en sí, sino que también permite automatizar la cadena de suministro para incrementar su eficacia y eficiencia a través de análisis predictivos o de la optimización del transporte.
Las tres áreas con mayor creación de empleo en el sector industrial son:
- Diseño, desarrollo y fabricación de tecnología robótica con aplicaciones de inteligencia artificial.
- Big data para el análisis y la mejora de procesos, con foco en la sostenibilidad y el ahorro energético tanto en la fabricación como en el almacenaje y transporte.
- Soporte técnico para el correcto mantenimiento de la maquinaria.
“En Robert Walters hemos observado una demanda creciente de perfiles de ingeniería y programación especializados que se encarguen de llevar a cabo el diseño y la fabricación de la robótica industrial del futuro”, añade López.
Reinventarse o morir
Con el fin de adaptarse a las últimas tecnologías y tendencias, los profesionales que trabajan en la industria deben formarse y capacitarse continuamente, solo así pueden mantenerse al día y seguir siendo un perfil de alto valor añadido para su compañía o, en caso de estar en búsqueda de empleo, para las empresas de la competencia.
Para conseguir fidelizar a este talento tan preparado y experto, las organizaciones deben poner mayores esfuerzos e incrementar sus presupuestos, no solo de capacitación a empleados, sino también de políticas de bienestar que generen sentimiento de pertenencia.
“Lo que hoy a una organización le parece una inversión elevada por captar o fidelizar a un profesional especializado, el día de mañana se traduce en reducción de costes gracias al incremento de la productividad y la eficiencia en los procesos. Si se analiza de este modo, un ingeniero con conocimientos y experiencia en las últimas tendencias de robótica industrial, sabe que cuenta con mayor poder de negociación salarial y de beneficios con su empresa actual o una futura contratante”, matiza López.