Los tiempos de incertidumbre aceleran la innovación. En un contexto de post-pandemia y con la amenaza de una recesión en el próximo ejercicio, las organizaciones tanto públicas como privadas están replanteando sus pilares.
La administración y las empresas ya están entendiendo que los diferentes elementos que afectan a los flujos de trabajo (personal, sistemas IT, bots, inteligencia artificial (AI) y la regulación) han de ser integrados en procesos automáticos de principio a fin en una sola plataforma para eliminar el trabajo repetitivo y aumentar la eficiencia.
Appian (Nasdaq: APPN), compañía líder en desarrollo de soluciones low-code que trabaja con grandes corporaciones (como 6 de los 10 mayores bancos del mundo, entre los que se encuentra alguna de las entidades financieras más importantes de España) y con la administración pública (impulsó en España el proceso para la gestión del ingreso mínimo vital, entre otros) revela las cinco tendencias que cualquier tipo de organización debe tener en cuenta para diferenciarse en el futuro próximo:
- Desarrollo del low-code y eficiencia: Una investigación llevada a cabo por Appian reveló que el 85% de los profesionales TI creen que tecnologías como el low-code, la inteligencia artificial (IA) y el machine learning serán clave para abordar los retos empresariales a los que se enfrentan los departamentos de TI, al tiempo que ayudan a las organizaciones a adaptarse al cambio y agilizan el trabajo. La plataforma abierta de low-code de Appian permite dar rienda suelta a la innovación digital e impulsar el crecimiento. De hecho, para 2023, Appian espera tener 68.000 millones de procesos automatizados funcionando en su plataforma, con el correspondiente ahorro para las organizaciones. En 2022, se estima que Appian ahorró al total de sus clientes 107 mil millones de euros con la automatización de procesos.
- Desarrollo de aplicaciones 10 veces más rápido: En el mercado del low-code actual se está dando una evolución muy rápida. Un estudio de The Wall Street Journal ya identificó que el low-code se estaba convirtiendo en una herramienta prioritaria para las empresas en 2019, lo cual se disparó en 2020 cuando éstas necesitaron adaptarse rápidamente a las circunstancias sanitarias. De hecho, según Forrester, el 75% de las empresas que crean aplicaciones web, móviles o infraestructura, utilizaban plataformas de low-code a finales de 2021.
En España, según investigaciones de Appian, el 50% de los desarrolladores ya están utilizando productos de low-code durante 2022, una tendencia que se manifiesta al alza ya que, en 2019, esta cifra era del 37%.
En este contexto, Appian presentó a finales de este año Appian Data Fabric, que permite crear aplicaciones hasta 10 veces más rápido, ya que facilita más que nunca la conexión y obtención de datos en entornos de difícil acceso. De esta forma, a partir de ahora, un cambio en cualquier dato de se refleja en tiempo real en todas las partes, lo que permite a los desarrolladores operar con un modelo único de datos.
- Finanzas y otros sectores Regulados. Con las economías en recesión, es habitual que aumente el escrutinio sobre los controles de procesos y una mayor aplicación regulatoria por parte de los gobiernos. En 2023, las empresas se enfrentarán a muchos desafíos relacionados con la transparencia financiera, la visibilidad de los sistemas en las cadenas de suministro y la supervisión de las políticas medioambientales. Para cumplir con estos requerimientos, sectores altamente regulados como el financiero o el de seguros tendrán que garantizar el control de procesos de principio a fin. Plataformas abiertas como Appian proveen de soluciones lo suficientemente versátiles que ya se están aplicando en sectores tan dispares como el financiero, seguros, sanidad, producción, telecomunicaciones, logística y cadena de suministro, etc.
- Sector público. La inversión en tecnología low-code de Appian en el sector público es un gran ejemplo de crecimiento y expansión. Desde que la compañía aterrizó en España en 2017, el low-code ha penetrado en diversas industrias, facilitando la transformación digital no solo de grandes empresas, sino muy especialmente de organismos públicos. El low-code es como un lienzo en blanco absolutamente transversal que se adapta perfectamente a organismos tradicionalmente opacos y saturados de información desconectada como puede suceder en el sector público. Un caso paradigmático fue el de la gestión de una nueva prestación para un departamento altamente burocratizado de la administración pública, que requirió ponerla en marcha en tres semanas cuando ese proceso con sus sistemas tradicionales habría tardado al menos seis meses. Appian desarrolló una solución táctica para ese caso en el breve período de tiempo establecido. Fue un caso de éxito que se podría establecer como solución tecnológica mantenida en el tiempo, agilizando los tiempos de espera y ayudando a la administración a ser más eficiente.
- Brecha de habilidades TI. Los líderes de los países se han dado cuenta que la diferenciación de sus compañías y administraciones vendrá a través de la excelencia tecnológica. De hecho, el Gobierno de España se ha fijado como meta incrementar en 20.000 el número de especialistas en datos, Inteligencia Artificial y ciberseguridad para 2025. Actualmente, no hay suficientes profesionales formados para atender las demandas del mercado laboral. El desarrollo low-code proporciona una trayectoria profesional lucrativa para las personas sin experiencia en programación ya que permite a las organizaciones crear potentes aplicaciones empresariales de manera eficiente y rápida, lo que reduce significativamente la necesidad de escribir código. Las plataformas de low-code y automatización permiten explorar oportunidades para mejorar y volver a capacitar el talento existente, permitiendo a un conjunto más amplio de usuarios participar en la innovación digital.