El sector de la distribución, como intermediario entre productores y consumidores, también se está enfrentando a los cambios que se están produciendo en los hábitos de consumo, como consecuencia de la complicada situación económica que atravesamos actualmente.
Nuevos retos como la correcta adaptación a las necesidades y expectativas de los clientes y a sus cambios de comportamiento (72 %), a una demanda impredecible y fluctuante (71 %) y el aumento de la competencia (68 %), sobre todo por parte de las grandes webs especializadas, se unen ahora a desafíos tradicionales como acontecimientos mundiales (81 %), interrupciones en la cadena de suministro (75 %), y el aumento de costes derivados de las reducciones de márgenes.
Estos son algunos de los datos que recoge el estudio “Los distribuidores de todo el mundo se transforman para adaptarse, sobrevivir y prosperar”, realizado por Sage, líder mundial en soluciones de gestión empresarial en la nube, en colaboración con IDG, que revela como los distribuidores están haciendo frente a los desafíos actuales, potenciando la digitivación, para lograr la reactivación económica de forma más rápida y, a la vez, más sostenible y humana a través de un plan digital.
El poder de la nube para la transformación digital
El 80% de los distribuidores a nivel mundial cuentan, actualmente, con estrategias de transformación digital, que les permiten optimizar las cadenas de suministro, y acceder a los datos de la organización en tiempo real, para predecir la demanda futura. En este contexto, la adopción de soluciones en la nube está demostrando ser muy útil para aquellos distribuidores que quieren modernizar sus aplicaciones empresariales: el 37 % de los encuestados ya está incorporando este tipo de tecnología en sus operaciones.
Las plataformas en la nube suponen una mejora considerable en términos de costes, tiempo, flexibilidad y procesos, ya que, por ejemplo, pueden englobar varias actividades de contabilidad en una sola aplicación, unificando operaciones de distribución en territorios globales y generando datos de utilidad para la predicción de comportamientos.
Además, muchos distribuidores están comenzando a adoptar otras tecnologías emergentes, como la automatización robótica de procesos (81 %), que les permite aumentar la eficiencia gracias a que la maquinaria se encarga de las tareas manuales, desde la planificación de envíos hasta la gestión del inventario y el seguimiento, para que los trabajadores pueden dedicarse a actividades que verdaderamente aporten valor a la empresa.
“El sector se está dando cuenta del potencial de reinventar las operaciones, utilizando aplicaciones en la nube. Además, combinadas con tecnologías emergentes como inteligencia artificial y análisis de datos, los distribuidores pueden conseguir cadenas de suministro más ágiles y resilientes, preparadas para satisfacer las demandas de sus clientes”, comenta Diego Sánchez Aparisi, Director de Product Marketing de Sage para España y Portugal.
La sostenibilidad como motor del cambio
Cada vez más empresas se están dando cuenta de la importancia de avanzar en el ámbito tecnológico, pero sin perder de vista el medioambiente. La transformación digital y la sostenibilidad van de la mano.
Por ello, el 75% de los distribuidores de todo el mundo han adoptado una estrategia de economía circular, para reducir la producción de desechos, y utilizar materiales renovables, reciclables o biodegradables, que garanticen la sostenibilidad del proceso. Para los distribuidores, este cambio está impulsado por la necesidad de reducir su huella de carbono (39 %), abordar las preocupaciones ambientales (38 %), aumentar la productividad, la eficiencia y la resiliencia (32 %) y mejorar su competitividad (31 %).
Nuevos modelos empresariales: la servitización
Con el 39 % de los distribuidores enfocados en mejorar el servicio y la experiencia de cliente, muchos están recurriendo a estrategias de servitización, para ofrecer a los clientes servicios y soluciones tecnológicas adicionales, relacionadas con actividades de distribución fundamentales, que les permitan acompañarlos durante todo el proceso.
Además, la servitización está demostrando ser una fuente rica y rentable para la innovación, ya que, en función de los servicios ofertados, los distribuidores pueden obtener datos fiables acerca de sus clientes, y seguir mejorando su oferta en función.
“Los distribuidores se están enfrentando a un nuevo y desafiante clima macroeconómico, por lo que deben trabajar para que sus negocios sean lo más innovadores y resistentes posibles. A través de nuevos modelos, como la economía circular y la servitización, los distribuidores están impulsando el crecimiento de sus negocios, y al mismo tiempo satisfaciendo las demandas de sus clientes. Un cambio que está siendo posible gracias a la tecnología”, concluye Sánchez Aparisi.
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