El 53% de los empresarios sostiene que más de la mitad de su plantilla necesitará cambiar sus habilidades en los próximos tres años, según un estudio de Deloitte. Además, agregan, el 52% admite que su estrategia pasa por contratar a excelentes aprendices que puedan desarrollarse para cumplir múltiples posiciones y futuras necesidades.
En el entorno volátil de 2020 y a medida que las empresas necesitan cambiar rápidamente sus estrategias de negocio, los líderes buscan en sus empleados capacidades de adaptación, resiliencia, comunicación y trabajo en equipo. De hecho, las ofertas de trabajo que requieren una o más habilidades blandas de este tipo (soft skills) han aumentado un 31% durante el confinamiento respecto al mismo periodo el año anterior. Sin embargo, aunque las soft skills ganan terreno a las hard (los conocimientos técnicos), muchas empresas todavía no han incorporado técnicas fiables para evaluar las habilidades de sus empleados y candidatos. De acuerdo a datos de LinkedIn, el 63% de los reclutadores manifiestan dificultades para identificar y evaluar soft skills.
Hasta ahora, las principales barreras para hacerlo habían sido el elevado coste, la presencia física y la poca escalabilidad de las herramientas. No obstante, empresas españolas están dando respuesta a esta necesidad de mercado con el objetivo de democratizar la medición de soft skills en la gestión del talento. Es el caso de S4hrtech, fundada por los creadores de Currofinder y desarrollada de forma conjunta con la Universidad Complutense de Madrid. La solución de S4hrtech gamifica la medición de habilidades blandas para traducirlas a datos, que puedan medirse y evaluarse de forma objetiva. Esta revolución de los recursos humanos agiliza los procesos de selección y prepara a las empresas para cambios más profundos a nivel organizacional. Así, la gestión de soft skills es más accesible tanto a un mayor número de compañías, como a diferentes niveles de responsabilidad dentro de la organización: desde el grueso de la plantilla hasta los puestos directivos.
“En este panorama tan cambiante, donde las necesidades de negocio pueden variar mes a mes, los profesionales de gestión de talento necesitan conocer más a fondo el equipo humano de su empresa y de los potenciales candidatos,” explica Nacho Hortal, CEO de S4hrtech. “Muchas compañías que están cambiando su estructura tras la pandemia, pueden encontrar una ventaja competitiva en las habilidades de sus empleados y de las potenciales incorporaciones. Al final, son las personas las que hacen prosperar una empresa y nuestra propuesta es ponerlas en el centro.”
Las ventajas de medir las habilidades blandas
A través de cuatro juegos sencillos, la solución de S4hrtech permite evaluar las habilidades de los empleados o candidatos. No sólo la empresa recibe un informe de resultados objetivos y fiables, sino que el empleado también recoge feedback sobre sus habilidades, puntos fuertes y áreas de mejora. La plataforma elabora un ranking de candidatos por afinidad con el puesto o puede adaptarse a las necesidades de cada proceso. Esta metodología, que cuenta con un 93% de fiabilidad y un 95% de ajuste en el modelo psicométrico, se ha desarrollado en colaboración con el Grupo de Investigación de Psicología Cognitiva de la Universidad Complutense de Madrid.
Medir las soft skills implica también un retorno sobre la inversión. Según el informe Infoempleo de Adecco 2019, los tiempos de los procesos de selección pueden llegar a reducirse en un 33%. Alrededor del 25% de los empleados que no encajan en un puesto de trabajo en los primeros 6 meses, es porque no se han medido bien sus habilidades blandas. A nivel organizacional, la medición de las competencias personales también promete transformar el sector del empleo. Los empleados estarán más cómodos en sus puestos de trabajo, se incrementará la diversidad en las empresas y el reparto de las oportunidades será más igualitario. A nivel individual, empleados y candidatos podrán tener una visión más objetiva de sus habilidades personales.
“Al final, encontrar a la persona perfecta para un puesto o una nueva tarea es un proceso complejo y con un margen de error muy pequeño, especialmente en momentos como el actual. En S4hrtech acompañamos y asesoramos a las empresas para que puedan conocer mejor a las personas, tanto a las que ya trabajan allí como a las potenciales incorporaciones, lo que les permite asignar mejor las habilidades de cada persona con las necesidades de cada proyecto” añade Hortal.
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