El Fórum de Jóvenes de ADEFAM ha analizado junto con la consultora global de innovación Opinno las tecnologías emergentes de 2016 y su impacto en el día a día de las organizaciones, y han llegado a la conclusión de que “la innovación tecnológica transformará radicalmente las estructuras empresariales”. Pedro Moneo, CEO de Opinno, que acaba de ser nombrado Young Global Leader de 2016 por el Foro Económico Mundial, y que en menos de siete años ha convertido a Opinno en una de las consultoras de innovación de referencia en nuestro país, asegura que ante el avance de la electrónica y su aplicación en la actividad productiva, “las empresas españolas tienen que cambiar y ser capaces de modificar sus estructuras para adaptarse a nuevas formas de hacer negocio”.
A este respecto, el CEO de Opinno, cree que el importante relevo generacional que se está produciendo en las empresas, tanto en clientes como empleados, e incluso dentro de los proveedores, va a ser crucial en este proceso de transformación. “Los cambios tecnológicos se suceden cada vez con más rapidez, lo que obliga a las personas y a las empresas a adaptarse a una verdadera revolución. Ahora, los ciclos de innovación se producen cada cuatro años, cuando hasta hace medio siglo tenían lugar cada 80 años”.
Los cuatro pilares de la innovación
A juicio de Moneo, que se ha unido a la comunidad mundial de líderes menores de 40 años con una visión global y de compromiso con la mejora del mundo, la innovación se apoya actualmente en cuatro pilares. En primer lugar, en el abaratamiento progresivo de los equipos electrónicos, que además son cada vez más pequeños. “Pronto podremos comprar un ordenador que quepa en un botón por muy pocos euros”. En segundo, el almacenamiento de datos, que ya se produce en la nube y en conexión por redes seguras. Se calcula que en 2020 será efectiva una conectividad global en el mundo. En este punto se inscribe el BIG DATA, que reúne los millones y millones de datos que proliferan por la red y que, gracias a los ordenadores, somos capaces de ordenar y analizar.
El tercer motor de la innovación es la inteligencia artificial de los “nuevos software” que conseguirán establecer patrones a través de la conversación entre los usuarios y las máquinas, para hacer un uso práctico del BIG DATA y poder conseguir procesos y conclusiones que sean de utilidad en los proyectos. Por último, serán decisivos los robots en dos concepciones: tal y como los imaginamos actualmente, y como un simple software capaz de hacer uso de esta conversación para actuar de forma independiente en nuestro beneficio, resume Moneo.
Moneo recordó además que gracias a este tipo de innovaciones se ha creado el BLOCK CHAIN, un software capaz de controlar de forma segura transacciones de dinero y que, conectado con otros campos de actividad como la música, puede controlar por sí solo cuándo se reproduce una canción en la Red y qué cantidad se tiene cobrar en derechos. De la misma manera, este software ha sido capaz de acerar la CRISPR, orientado a leer el genoma y alterarlo para corregir errores.
Para Pedro Moneo, estamos llegando a una revolución que nos obliga a nuevos métodos de trabajo y, sobre todo, a cambiar la forma de ver cómo se actúa desde las empresas. “Triunfarán aquellos que sepan escuchar y dar la vuelta a sus organizaciones para adaptarse a las nuevas necesidades”, vaticinó.
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