La Generalitat de Cataluña va a pagar a las agencias de colocación y empresas de trabajo temporal hasta 600 euros por cada parado al que encuentren un empleo de, por lo menos, seis meses de duración. Aunque el objetivo es llegar a 10.000 desempleados, se espera que las agencias privadas encuentren trabajo a una cuarta parte.
Así, después de años de anunciarlo, a principios de abril el Govern sacará la primera convocatoria de la privatización del Servicio de Empleo de Cataluña (SOC).
Tiene previsto licitar convenios por 1,9 millones de euros, y contempla 40 euros por parado atendido en concepto de gastos de tramitación, se consiga ocuparlo o no, y 600 por desempleado a quien encuentren un empleo.
El periódico informa que la Generalitat traspasará a los privados aquellos perfiles que considera ocupables, es decir, desempleados que se encuentran en esta situación entre medio año y un año pero que no precisan ninguna formación.
Para articular este proyecto, se elegirá a las oficinas que tengan entre 100 y 300 parados de este perfil y se repartirán entre las empresas privadas de colocación por proximidad. En grandes ciudades como Barcelona, donde hay más agencias, el SOC elegirá a las que hayan demostrado mayor actividad.
Según explica el presidente de la patronal catalana de las agencias de colocación Acacer, Àngel Buxó, en declaraciones que recoge El País, la previsión de la Generalitat es que de las 10.000 personas, los privados encuentren trabajo a una cuarta parte.
Buxó aplaude que la Generalitat haya aceptado el pago de los gastos fijos, los 40 euros por persona atendida, consigan insertarla laboralmente o no. Ese es el motivo por el que la partida de la primera convocatoria de la privatización haya pasado de los 1,5 millones que se anunciaron en un principio, a 1,9 millones.
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