El grupo de Izquierda Unida en la Diputación de Zamora afirma haber recibido denuncias de aspirantes a la convocatoria de oposiciones para cubrir la Oferta de Empleo Público por la obligatoriedad de entregar junto con la instancia de participación una fotografía personal. La diputada Laura Rivera ya advirtió en un escrito dirigido al presidente, Fernando Martínez Maíllo, «de la irregularidad de esta medida, excepcional por no decir única en las administraciones públicas».
Este año se mantiene lo que a a juicio de IU «y de muchas personas que se van a presentar a las pruebas de acceso, es un grave error que pone en entredicho la necesaria objetividad e imparcialidad exigible a esta Diputación como administración sujeta a las normas de acceso a la función pública».
Insiste Rivera en que no tiene justificación pedir una fotografía de los aspirantes a un empleo público, ni puede ser un requisito de obligado cumplimiento «por ser el aspecto físico personal un dato irrelevante para las oposiciones convocadas, y porque el carné de identidad es un documento suficiente para acreditar la personalidad del opositor».
A la coalición le consta que la aportación de una fotografía no aparece en ninguna de las oposiciones convocadas por las administraciones públicas, por lo que requerir una imagen en la documentación para presentarse a las oposiciones de la Diputación «no obedece a ningún criterio general que garantice los derechos de los opositores ni los principios de capacidad, mérito y publicidad de las convocatorias públicas de empleo».
La coalición considera que las circunstancias de la oferta de empleo de la Diputación no son, o no deberían ser, diferentes a las de otras administraciones.
Malestar
Por segundo año consecutivo, esta excepcionalidad «está creando un malestar entre los aspirantes a las pruebas y una sospecha negativa sobre las causas que mueven a la Diputación a exigir una foto en el expediente para identificar a los opositores», afirma Rivera. IU entiende que los opositores deben ser identificados exclusivamente a la hora de realizar las pruebas, pero que en los demás procesos (corrección, baremación, etcétera) debe garantizarse el anonimato, algo que se dificulta si en el expediente consta una foto.
Laura Rivera solicita que se den inmediatamente instrucciones para que el modelo de instancia sea modificado, anulando el requisito de la fotografía «toda vez que se puede estar cometiendo una manifiesta ilegalidad que tiene que ver con la protección de la intimidad de las personas».
De no hacerse así, Izquierda Unida, entiende que las oposiciones estarán bajo sospecha pública fundada.
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