Durante su intervención en el III Foro Pyme Extremadura, organizado por el diario Hoy de Badajoz, Ron ha emplazado al sector financiero a aprovechar las oportunidades que la economía presenta en la actualidad.
“Tenemos que sacar el máximo partido al aumento de la ocupación que se ha producido en España en los últimos dos años (más de un millón de empleos)”, indicó el presidente de Popular. “Un mayor empleo supone una renta disponible de los hogares más elevada, que fortalece el consumo privado y lleva a las empresas a ser más productivas y también a invertir más”.
Ron ha definido un escenario empresarial en el que la economía española se encuentra en franco crecimiento, en tanto que la normalización de la política monetaria o la evolución del crecimiento mundial llevarán más tiempo. En tanto, factores estructurales, como la tecnología, el foco en el cliente o la tendencia a la sobrerregulación del sector van a acompañar todavía a la industria durante un largo periodo de tiempo.
En cuanto a la acción, el presidente de Popular manifestó que: “No hemos modificado ninguno de nuestros mensajes y estamos ejecutando lo que habíamos anunciado. El mercado ha castigado a la acción de Popular porque creo que se quiere que lo que hemos anunciado se produzca lo antes posible, pero no por los fundamentales del banco”. Ron indicó que los movimientos actuales “tienen un componente especulativo, que no está justificado si se miran las fortalezas de la entidad”. Asimismo, recordó que Popular va a cumplir el plan anunciado de reestructuración y transformación y subrayó que es uno de los mejores bancos por su ratio de eficiencia, que ha separado el negocio bancario del inmobiliario, que cuenta con un liderazgo indiscutible en el sector de las pymes, que son el segmento más rentable del mercado.
Adaptarse a los cambios
Ron ha exhortado a una mayor flexibilidad por parte de las entidades, con un “constante esfuerzo de mejora en servicios, control de riesgo, eficiencia y, sobre todo, rentabilidad”. En esta situación, el presidente de Popular ha señalado que “los ganadores serán aquellos bandos que sepan y sean capaces de adaptarse a esta transformación estructural, impulsando un modelo de negocio rentable, apoyado en un apalancamiento sostenible y negocios de alto valor añadido”.
En cuanto a su entidad, Ron ha indicado que Popular se encuentra en un proceso de “optimización de los recursos con el fin de transformar y adaptar las actuales estructuras territoriales de apoyo a la red comercial, optimizar la red de sucursales y redimensionar los servicios corporativos y áreas de servicios centrales”.
Un proceso de optimización cuyos objetivos son no sólo modernizar las estructuras de la sociedad, sino adaptarlas a la Banca Digital y a mejorar la relación coste-beneficio del negocio “consolidando nuestra vocación de independencia en beneficio de los intereses de los clientes, empleados y accionistas”.
Ron ha vuelto a reafirmar el compromiso del banco con las pequeñas y medianas empresas (pymes) y los trabajadores autónomos. El banco mantiene un fuerte compromiso con pymes y autónomos, con 40.000 millones de euros de financiación concedida en balance. Popular dispone ya de un millón de pymes entre sus clientes y el 63% de la producción crediticia de 2016 se ha destinado a las pequeñas y medianas empresas y a los autónomos.
Tipos negativos
Durante su intervención, Ángel Ron se ha mostrado categórico a la hora de abordar el inusual escenario de tipos de interés en el que se encuentra la industria. “No hay negocio bancario viable a medio plazo en un mundo de tipos negativos. De ahí que podamos hablar de que la banca está en un proceso de reconversión y de transformación. Reconversión para ajustar las plantillas y oficinas a los hábitos de los consumidores, y transformación para evolucionar hacia una gestión en la que lo digital va a ir adquiriendo más peso”. Una circunstancia que cobra aún más sentido en el caso de las entidades que prestan a empresas y familias.
“Los tipos de interés negativos representan una seria distorsión que sólo se puede mantener por un breve lapso de tiempo”, aseguraba el presidente de Popular. Y advertía sobre la “imposibilidad práctica de aplicar tipos negativos a los depósitos minoristas, cuya remuneración no puede bajar de cero”. Destacaba también el carácter absurdo de los tipos de interés negativos en España, porque son característicos de momentos de caída de la productividad y de las expectativas de crecimiento, todo lo contrario de la situación actual, según Ron.
España necesita crecer
A lo largo de su exposición, Ron ha señalado que la economía española “necesita crecer”, lo que sólo se logra con un equilibrio entre una adecuada productividad, una regulación ponderada y el acceso a la financiación. Indicó que mientras las empresas se internacionalizan, el equipo directivo mejora en cualificación, pero que aún hay que vencer el carácter anticíclico de la productividad laboral, porque el producto por trabajador aumenta en épocas de crisis y disminuye en épocas de expansión económica. Todo lo contrario de lo que sucede en países como Alemania o Estados Unidos.
Ha criticado también el insuficiente grado de innovación tecnológica o de inversión en investigación y desarrollo de las empresas. Señaló los efectos beneficiosos de potenciar sectores como automoción, alimentación, química o electrónica y maquinaria porque generan impactos muy elevados en la demanda del resto de sectores. “España debería sacar partido a todo su potencial y, sobre todo, reforzar la capacidad exportadora de sus empresas”, señaló Ángel Ron.
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