En los últimos años, el estrés se ha convertido en una de las principales razones que llevan a la ciudadanía a solicitar la baja laboral. Durante 2023, se alcanzó en nuestro país la cifra récord de casi 600.000 personas que estuvieron de baja laboral por problemas de salud mental derivados del trabajo. Por ello, en los últimos años ha aumentado la preocupación por parte de las empresas sobre la salud de los empleados/as y cómo pueden contribuir a mejorarla.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el entorno laboral puede influir de manera significativa en el bienestar de las personas, creando estrés, ansiedad y agotamiento. Para contrarrestar estos efectos, cada vez son más las empresas que están desarrollando e implementando medidas en los espacios de trabajo para convertirlos en entornos seguros y saludables que impacten de manera positiva en la salud tanto física como mental de las personas.
Barómetro Esade-ISS, las personas en el centro del workplace sostenible
Según los datos que recoge el primer Barómetro Esade-ISS de Sostenibilidad en el Workplace, elaborado por el Instituto de Innovación Social de Esade junto a ISS España, el 68% de los directivos que ha participado en la muestra considera importante la (re)naturalización de los espacios de trabajo, con la integración de elementos naturales como plantas o favorecer el uso de luz natural, aspectos que pueden tener un impacto positivo en la salud mental de los empleados/as, reduciendo sus niveles de estrés y mejorando tanto su estado de ánimo como su capacidad de concentración.
Además de implementar políticas flexibles que permitan a las personas equilibrar su vida personal y profesional, también se ha vuelto esencial invertir en el diseño de espacios físicos agradables y ergonómicos que promuevan un mayor bienestar mental, con iluminación natural, zonas para la colaboración o áreas verdes que ayuden a la relajación y al confort.
Sonia Ruiz, colaboradora académica del Instituto de Innovación Social de Esade y autora del Barómetro, ha querido señalar que “ha habido muchos cambios disruptivos en el workplace en estos últimos 4 años, entendiendo este concepto como el ecosistema de impacto en el cual una empresa tiene capacidad de influencia, tanto el espacio físico y virtual, como la interacción y la relación que tiene con toda la cadena de valor”. También ha querido destacar la importancia de la sostenibilidad como “una palanca de transformación empresarial, más allá del cumplimiento normativo, la sostenibilidad debe verse como catalizador de cambios de procesos, modelos de negocio; estar en el centro de la gestión de tomas de decisiones e integrarse en la cultura empresarial, gobernanza y liderazgo”.
El workplace sostenible coloca a la persona en el centro y posibilita entornos de cuidado, conexión y autoconocimiento que aporten seguridad, bienestar integral y oportunidades de desarrollo profesional. De hecho, el Barómetro Esade-ISS pone de relieve que, para atraer el talento, los espacios no solo deben priorizar el bienestar y fomentar el empoderamiento profesional, sino también activar con coherencia proyectos de sostenibilidad y compromiso social, manteniendo principios de ética, transparencia y buena gobernanza.
“La pandemia nos brindó la posibilidad de rehacer cómo podían ser los espacios adaptándolos a las nuevas modalidades de trabajo híbrido. Además, ayudó a democratizar los entornos y a crear lo que yo denomino “espacios líquidos”, es decir, zonas colaborativas que se van transformando según las necesidades. En el caso de ISS, esta evolución ha acabado impactando tanto en las personas que trabajan en oficinas como en las de primera línea que están con nuestros clientes, que han acabado proponiendo acciones para mejorar los espacios en las empresas e instituciones donde desarrollan su actividad” explicó Eulalia Devesa, directora de Sostenibilidad Social de ISS España, durante la mesa redonda del Barómetro Esade-ISS de Sostenibilidad en el Workplace, elaborado por el Instituto de Innovación Social de Esade junto a ISS España.
Las empresas más avanzadas en estos aspectos de sostenibilidad se enfocan en el cuidado y la salud integral de las personas abordando la experiencia del empleado con una visión 360º, que promueva el bienestar integral (físico y psicosocial), a través de políticas y medidas que verdaderamente fomenten la salud mental y emocional de todos los empleados que forman parte del equipo, creando espacios en los que se mejore la calidad de vida de las personas mientras que, al mismo tiempo, se cuida del planeta
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