La concienciación, la prevención y la dotación de recursos son los principales desafíos a los que se enfrentan las empresas, según han coincidido diferentes médicos del trabajo y psicólogos en una campaña impulsada por Affor Health, consultora especializada en bienestar psicosocial, coincidiendo con el Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra cada 10 de octubre.
Esta iniciativa cuenta con un microsite específico en el que a través de cinco vídeos con profesionales del Hospital Universitario Puerta de Hierro, de la Asociación de Especialistas Enfermería del Trabajo (AET), de la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT), del Grupo OTP y Europreven, y de Health & Heal se destacan los beneficios que tiene para las organizaciones prevenir los riesgos psicosociales.
Los médicos del trabajo y psicólogos coinciden en que, para empezar a cuidar de la salud mental de los empleados, lo primero que tienen que hacer las empresas es reconocer que existen esos riegos asociados al trabajo como el estrés, la ansiedad, la fatiga o el desgaste laboral o síndrome de burnout, y que se tienen que afrontar. Así, la prevención primaria es fundamental para que las organizaciones actúen antes de que los empleados puedan enfermar porque las patologías no se solucionan por sí mismas y necesitan de ayuda médica.
Los profesionales convienen que una vez que la empresa se decide a fomentar el bienestar de sus empleados, cuidan de la propia salud de las organizaciones, evitando contribuir a los 12.000 millones de días de trabajo que se pierden al año debido a la depresión y la ansiedad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), lo que cuesta a la economía mundial 1.000 millones de euros.
Para ello, es necesario que las empresas pongan en marcha diferentes herramientas como evaluaciones de impacto psicosocial para analizar el estado de afectación de la salud psicológica de los empleados, que es el primer paso para poder adoptar las medidas que mejor se ajusten a los posibles riesgos psicosociales de la organización y que ayuden a proteger su salud laboral. Después es necesario potenciar el liderazgo saludable, facilitando herramientas que ayuden a gestionar el estrés mediante programas individuales de competencias y el autocuidado. Y, por último, el acompañamiento psicológico de los empleados. Los profesionales coinciden en que las empresas, independientemente de su tamaño, pueden ofrecer un valor añadido a sus empleados con servicios de psicología clínica o consultoría externa para atender problemas de salud mental y riesgos psicosociales. Para ello, existen herramientas como el Programa de Ayuda al Empleado (PAE), con el que los empleados disponen de un psicólogo online en línea, 24 horas al día 7 días a la semana, a través de diferentes medios, además de tener otros recursos digitales de psicoeducación y gestión emocional.
Los profesionales que han participado en esta iniciativa de Affor Health por el Día de la Salud Mental, destacan la importancia de que las empresas inviertan en recursos para promover el autoconocimiento físico, mental y emocional de los trabajadores y el alto retorno que tiene invertir en las estrategias de promoción de bienestar para los empleados, lo que fomenta organizaciones saludables, que evitan las bajas laborales.
Cinco recomendaciones para cuidar la salud mental en el trabajo
Por otra parte, el equipo de psicólogos del Hub de Affor Health ha preparado una serie recomendaciones para cuidar la salud mental en el trabajo de manera individual:
- Toma de conciencia. El estrés acumulativo es especialmente perjudicial porque mantiene en un estado de alerta permanente a tu organismo. Y esto, se traduce en síntomas como irritabilidad, cansancio, dificultades en la concentración; y en emociones como tristeza o ira. Por eso es necesario conocer qué te está diciendo tu cuerpo.
- Descanso. Es fundamental que tu mente se relaje cuando no trabaja, pero también cuando lo hace. Después del trabajo es recomendable realizar ejercicio, pasear o dedicar parte del día a otras actividades para desconectar y poder dormir bien. También dentro del horario laboral es aconsejable contar con pequeños intervalos de desconexión que ayudarán a tener una mente más despejada y en orden.
- Saber poner límites. Tanto a nivel personal como profesional saber cuándo decir no, es una estrategia de relación con uno mismo que permite vivir de una forma saludable. Si se nota la mente cansada o agobiada, es momento de parar para pensar y organizarse mejor.
- Potenciar las habilidades sociales. En distintas áreas de la vida, pero también en el trabajo, es bueno para nuestra mente mantener relaciones cordiales y saludables con los demás. Mente abierta, flexible, comprensiva, solidaria, empática… son algunas variables que bien desarrolladas ayudan a gestionar las relaciones con los demás. Si pensamos en el espacio laboral como un conjunto de personas cuyas funciones están relacionadas, y muchas veces dependen unas de otras, el cuidado mutuo es fundamental para generar espacios de bienestar que nos acojan y faciliten la tarea.
- Ordena la mente y el espacio de trabajo. Necesitamos trabajar en un espacio cómodo, con buena luz, temperatura y ordenado para que uno pueda concentrarse en sus responsabilidades. Además, es necesario optimizar el tiempo para que las tareas no le superen y poder cumplir con los objetivos.