Cuando solo el estrés laboral está costando 20.000 millones de euros[1] cada año en Europa, es normal que las empresas estén invirtiendo cada vez más en su principal activo: los trabajadores.
Cuidar la salud mental y el bienestar del equipo, si bien no es una necesidad nueva, se ha hecho más evidente a partir de los cambios y la incertidumbre laboral que nos ha dejado la pandemia. No atender esta necesidad a tiempo puede traer consecuencias importantes, no solo para la persona, sino también para la empresa.
Cuando las bajas laborales se disparan
La nueva Estrategia de Salud Mental ya indica que los problemas de salud mental son la segunda causa de baja laboral, y afectan al 22% de los trabajadores[2] . Y si a esto le añadimos que no todos los afectados reconocen abiertamente la causa de la baja debido al estigma a la hora de hablar de estos problemas, la realidad pinta aún peor.
Como es lógico, las bajas suponen un duro golpe al rendimiento de la empresa, que tiene que buscar la forma de cubrirlas temporalmente. Lo que muchas veces implica asignar nuevas responsabilidades a otros miembros del equipo y formarlos, o incluso contratar temporalmente a otra persona, con la inversión de tiempo y dinero que esto acarrea.
El coste del absentismo, el presentismo y la rotación de personal
Pero aunque no conlleven baja laboral, los problemas de salud mental siguen teniendo un impacto negativo en la productividad. En particular, la depresión, la ansiedad y el estrés mantenido, así como las consecuencias físicas de este último, están aumentando las tasas de absentismo laboral.
Otras personas, en cambio, siguen acudiendo al trabajo a pesar de estos problemas. Pero su eficiencia en el trabajo se ve claramente comprometida. Muchas veces se debe a una mala gestión del trabajo por parte de la empresa, problemas de liderazgo o una falta de apoyo, cuestiones que parecen complicarse con el teletrabajo.
Al final, si no se toman medidas a tiempo, la persona suele acabar dejando su puesto de trabajo indefinidamente o pidiendo la jubilación anticipada.
La mejor inversión pasa por la prevención
El problema es que los tradicionales PAE (programas de asistencia al empleado) se quedan cortos en cuanto a prevención, ya que se centran en la intervención psicológica cuando se podrían haber tomado medidas mucho antes.
Por eso existen plataformas online de bienestar y salud mental para empresas como la de Mindgram que, además de ofrecer apoyo psicológico para todo el equipo, se centra en la prevención y la intervención temprana. Se trata de una solución holística que aborda el bienestar del equipo en todas las facetas de su vida.
Por un lado, aporta recursos útiles y prácticos al equipo en forma de talleres, minicursos y pódcasts. De esta forma, aprenderán recursos para controlar el estrés, gestionar sus emociones y adoptar hábitos saludables, además de adquirir nuevas habilidades.
Por otro lado, el equipo puede acceder a ayuda psicológica siempre que lo necesite de forma anónima y privada. Los empleados pueden utilizar el chat para hablar con psicólogos, expertos en nutrición, mentores de negocios y otros especialistas cualificados que sabrán guiarlos y ofrecerles exactamente la ayuda que necesitan, lo que incluye sesiones de psicoterapia online.
Invertir en una solución más rentable y eficaz
Es importante contar con un programa flexible y escalable que se adapte a las necesidades de la empresa, como las que exige el nuevo modelo de trabajo híbrido (remoto y presencial). Un programa que brinde las herramientas necesarias para evitar el aislamiento y la desconexión emocional propios del teletrabajo.
Mindgram aporta todas estas ventajas en una única plataforma, lo que significa que la empresa puede sustituir varias soluciones por una sola y, así, reducir gastos y las complicaciones a la hora de gestionarlo todo. Además, el equipo siempre recibe instrucciones claras y comunicaciones que incitan al uso de la plataforma, mientras que la empresa obtiene informes mensuales para evaluar no solo el bienestar y la salud de toda la organización, sino la utilidad de la plataforma.
Al final, se trata de contar con una solución que, a diferencia de los programas de asistencia tradicionales, se acabe usando y no se convierta en un gasto más para la empresa.
Un entorno de trabajo más implicado y productivo
El cuidado del bienestar y la salud mental pasa por la concienciación y el aprendizaje continuo sobre estos temas. Es la clave para acabar con el estigma de la salud mental y dotar al equipo de las herramientas necesarias para afrontar el estrés y otros problemas en su día a día.
Cuando el equipo se siente atendido y apoyado emocionalmente por la empresa, aumenta su implicación en el trabajo. Pero también se siente más seguro a la hora de hablar de sus problemas, lo que facilita tomar medidas a tiempo antes de que la situación sea irreversible.
Este clima de trabajo, además, mejora la imagen de la empresa en el sector de cara a atraer a los mejores candidatos.
Por lo tanto, invertir en la salud mental y el bienestar de tu equipo es un paso fundamental para retener el talento y reducir las bajas laborales, el absentismo, el presentismo y la rotación del personal que tantas pérdidas financieras y de capital humano conllevan
Fuente: https://www.huffingtonpost.es/entry/las-claves-de-la-estrategia-de-salud-mental-que-impulsa-hoy-el-gobierno_es_61aa2028e4b0f398af202f5a
Fuente: https://www.huffingtonpost.es/entry/las-claves-de-la-estrategia-de-salud-mental-que-impulsa-hoy-el-gobierno_es_61aa2028e4b0f398af202f5a
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