El 80 % de las empresas saben que cuidar a su empleado repercutirá, de manera directa, en un aumento de su productividad y rendimiento, lo que a la larga se traduce en beneficios para el negocio. Sin embargo, la mayoría de las empresas no es capaz de identificar, ni crear programas y medidas de bienestar efectivas, cuyo impacto se pueda medir siempre en indicadores de negocio. El wellness coach ejecutivo es un profesional clave que se integra dentro de las empresas para cubrir este vacío. Una profesión en auge y necesaria que llega por primera vez a España de la mano del Wellness Coach Institute.
El cuidado y bienestar de los empleados ha sido, durante mucho tiempo, la asignatura pendiente de las empresas. «Sin embargo, hemos observado que, desde la declaración de la pandemia, la mayoría de las empresas han comenzado a poner de nuevo el foco en la protección de la salud de sus empleados, con el objetivo de fomentar su bienestar, productividad y rendimiento. Es cierto que se prevé un estancamiento salarial, por eso las empresas están incorporando nuevas medidas y estímulos para contentar y contener a sus empleados con el objetivo de cuidarlos, fomentar su sentido de pertenencia, reducir el absentismo y evitar una posterior fuga de talentos», afirma Carlos Vasallo director del Wellness Coach Institute.
De hecho, un factor como el absentismo laboral, por ejemplo, no es un problema de ahora. Datos recogidos en 2019 por Randstad apuntaban que más de 1 millón de personas no acuden a su puesto de trabajo de media cada día. Y no solo eso, el 43 % de los responsables de RRHH indican que uno de los mayores retos es mejorar el compromiso de los empleados con la empresa.
«Para evitar estos fenómenos, que no solo perjudican a la productividad de las empresas sino también al resto de profesionales del equipo, se antoja fundamental introducir en las organizaciones la ‘cultura del bienestar’, una cultura que, de manera paralela, atraiga, retenga y cuide al mejor talento. Este es, sin duda, uno de los mayores retos de los responsables de RR.HH», sostiene Ángeles Gris fundadora del Wellness Coach Institute.
Esta cultura del bienestar llega a España de la mano del wellness coach ejecutivo, un profesional clave que se integra dentro de las empresas para mejorar el rendimiento de sus trabajadores, diagnosticando y creando programas de bienestar efectivos, cuyo impacto se pueda medir siempre en indicadores de negocio.
¿Cuáles son los factores que más suelen determinar el bienestar de los trabajadores?
Aunque cada empresa y contexto es diferente y el wellness coach ejecutivo tendrá que analizar cada caso de manera particular, existen a grandes rasgos 4 indicadores que están estrechamente relacionados con la baja productividad, la fuga de talentos o el aumento del absentismo y la tensión laboral y, que, a la larga, trastocan especialmente el bienestar de la plantilla.
- Estrés. El estrés, es uno de los problemas de salud a los que debemos prestar una mayor atención, ya que la importancia de sus consecuencias es muy grande. «Gestionarlo o prevenirlo en el ámbito laboral, y más en una situación de crisis como la actual, ayudará a que las empresas puedan mantener un adecuado nivel de salud mental y físico entre sus empleados evitando que se disparen las tasas de bajas o absentismo laboral», afirma Ángeles Gris.
- Sueño. «A nivel organizacional, una mala gestión de nuestro sueño puede llevar al aumento del riesgo de padecer accidentes laborales, una disminución de hasta un 25 % de nuestra productividad y grado de capacitación, así como una afectación de nuestras relaciones con compañeros de trabajo, clientes, jefes, etc».
- Alimentación. «Varios estudios corroboran que una alimentación deficiente o incompleta puede llegar a disminuir hasta un 30 % el rendimiento en un trabajo físico», añaden los dos directores del Wellness Coach Institute.
- Movimiento. «Practicar ejercicio físico, un máximo de cuatro días a la semana, mejora el rendimiento laboral en un porcentaje del 300 %. Es una afirmación tan tajante como verídica», señala Vasallo, apoyado en un estudio realizado por la multinacional norteamericana Gympass.
¿Cómo implementar correctamente estrategias de bienestar dentro de una empresa?
Esa es la principal labor del wellness coach ejecutivo, un perfil profesional que llega por primera vez a España de la mano del Wellness Coach Institute para integrarse en el ámbito organizacional y profesional. Antes de poner en marcha estrategias de bienestar en las organizaciones, el wellness coach ejecutivo realizará un diagnóstico previo y exhaustivo para obtener el mayor número de datos posibles sobre la situación real y su impacto en indicadores de negocio.
Esos datos se obtienen a través de encuestas de Clima de Bienestar, test de percepción de nivel de estrés y como novedad la evaluación DISC Wellness, mediante un test que proporciona un perfil único de cada empleado y permitiendo desarrollar programas a medida.
«Una de las principales habilidades con las que cuenta el wellness coach ejecutivo es la correcta aplicación del ‘Disc Wellness’, la herramienta más avanzada del mundo en tendencia conductual de la persona. Gracias a ella, estos profesionales serán capaces de tener un conocimiento profundo del comportamiento de las personas, sus patrones de conducta, sus hábitos y sus motivadores para así cambiarlos o incluso poder predecirlos», explica Ángeles Gris, experta en esta herramienta.
Después llega el momento de diseñar la estrategia. Una vez que se han identificado de manera global los factores que determinan el mayor o menor bienestar del trabajador, llega el momento de corregirlos poniendo en en marcha acciones cuyo impacto sea medible en indicadores de negocio. Medidas que se explican más adelante y como podrían ser la conciliación laboral, el ajuste de horarios o la valoración del empleado.
La estrategia diseñada se implementa a través de una metodología propia del Wellness Coach Institute llamada Dreams Coaching Model con una estructura compuesta por 5 fases: desafío, realidad, exploración, acción, medición y sostenibilidad. Finalmente, pero de manera periódica, el wellness coach ejecutivo mide el impacto y el retorno de la inversión de las acciones implementadas para reajustar o rediseñar el plan estratégico de bienestar.
¿Qué medidas concretas pueden llevar a cabo las empresas para para fomentar el bienestar de sus trabajadores?
Estos serían los 4 pasos necesarios para implementar correctamente estrategias de bienestar en las organizaciones. Sin embargo, para Vasallo y Gris, existen una serie de propuestas que suelen tener buena acogida por parte de los empleados y de las empresas a la hora de velar por su bienestar y que ayudan a combatir y reducir los efectos de “los 4 jinetes del apocalipsis del rendimiento o bienestar laboral” mencionados anteriormente.
- Políticas de conciliación. Poner en marcha medidas (después de haber escuchado al colectivo implicado) para conciliar la jornada laboral y la vida personal es una de las pautas que, en general, hace sentir mejor al empleado. Permitir una flexibilidad horaria, ofrecer la opción del teletrabajo, dar el día del cumpleaños libre o incluso contar con servicio de guardería son algunas de las opciones que más valoran los profesionales, además de que impulsarían la productividad y el sentido de seguridad entre los empleados.
- Desterrar la cultura del presentismo. «Un trabajador no es mejor profesional ni está más implicado con la empresa por estar más horas en su puesto. La cultura de ‘calentar la silla’ y de que nadie se mueva hasta que se vaya el jefe es muy frecuente en países mediterráneos como España. Sin embargo, está demostrado que la productividad va decayendo a medida que pasa el día. Por ese motivo fomentar medidas como el teletrabajo o el trabajo por objetivos son prácticas que cuentan con gran aceptación por parte de los empleados», afirma Gris.
- Ajuste de horarios y tiempo para comer. Según un estudio de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios (Arhoe), los españoles salimos del trabajo dos horas más tarde que gran parte de los europeos.»Esto se debe a la cultura del presentismo, que hemos mencionado anteriormente, y también a que en muchas empresas se ha pasado de dedicar más de dos horas para comer a comer rápidamente, muchas veces en la misma mesa de trabajo, sin que eso implique salir antes y así tener más tiempo de ocio o para dedicarlo a sus familias», apunta Vasallo. Flexibilizar los horarios de entrada y salida, así como el uso del tiempo del que disponen los trabajadores para hacer frente a asuntos propios por ejemplo mediante una bolsa de horas que puedan distribuir libremente, o racionalizar los horarios adaptándose a los usos europeos, son algunas de las medidas más populares.
- Mejora del espacio y del ambiente de trabajo. La gran cantidad de horas que pasamos trabajando hacen que la comodidad en el puesto de trabajo sea un factor de vital importancia para la mayoría de los empleados. «Esto pasa por ejemplo por tener una silla ergonómica, un potente ordenador, software actualizado…», sostiene Gris. «Pero aún podemos ir más allá. En este punto podríamos hablar por ejemplo de poner en marcha programas de wellness y salud. En este punto podríamos hablar por ejemplo de medidas como el re-acondicionamiento acústico y lumínico de los espacios de trabajo, o acciones que ayuden a mejorar el clima laboral como encuentros, retiros, teambuilding, talleres etc».
- Valoración del empleado. La motivación y la implicación de los trabajadores en los objetivos de la empresa son pilares fundamentales para el funcionamiento positivo de un negocio. Valorar el talento es el primer paso para retenerlo, pero ¿cómo? «A través del reconocimiento público de sus logros valorados de forma objetiva, con herramientas de medición. A nadie le amarga una palmada en la espalda y es tarea del empresario saber cómo y cuándo hacerlo. Muchos trabajadores se sienten frustrados porque sus jefes sólo reconocen o parecen darse cuenta de las meteduras de pata. Sin embargo, es vital para el bienestar del empleado valorar sus esfuerzos, sus esfuerzos, su compromiso y su alineación con los valores corporativos», afirma Gris
Estas son algunas medidas que, a grandes rasgos, las empresas pueden llevar a cabo para fomentar el bienestar de los trabajadores. Sin embargo, Gris y Vasallo hacen hincapié en que no todas las empresas requerirán de este tipo de medidas. Siempre será necesario que el wellness coach ejecutivo realice un análisis detallado y evaluación previa a la actuación.
«A partir de la identificación previa y el diagnóstico personalizado, el wellness coach ejecutivo pondrá en marcha una serie de estrategias capaces de mejorar no solo el bienestar del empleado sino también la cuenta de resultados anual de la empresa», concluye Vasallo.
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