Mutua Montañesa, mutua colaboradora con la Seguridad Social número 7 y con más de un siglo de vida dedicado a la gestión de la salud laboral de sus empresas y profesionales protegidos, pone fin a este periodo de excepcionalidad haciendo un balance positivo de sus servicios durante este periodo. Esta afirmación se debe en gran medida al excelente desempeño de todos los profesionales, después de haber potenciado su actividad para ofrecer la mejor asistencia y de poner sus instalaciones y profesionales a disposición de las necesidades críticas que entonces sufría el país.
La continuidad en el servicio de asistencia se aseguró gracias a la rápida actuación en el plano digital y telemático, con la ampliación y agilización de los procesos para ofrecer un servicio más fácil y adaptado mediante consultas telemáticas. Así, desde el 16 de marzo hasta el pasado 16 de junio, las distintas delegaciones de Mutua Montañesa en toda España atendieron un total de 1.640 teleconsultas, especialmente en el ámbito psicológico. También fue muy relevante el seguimiento de las rehabilitaciones de los pacientes, muchas realizadas a través de sesiones de telerrehabilitación, a través de las cuales se han podido compartir ejercicios y revisiones por parte de los especialistas. En estos 90 días, el número de consultas de este tipo fue de 2.798.
Algo a destacar por los profesionales sanitarios de la Mutua, y en general de toda España, es la gran necesidad de socializar de muchas personas durante el confinamiento. Así lo asegura Javier Pérez de la Torre, director del Hospital Mutua Montañesa de Santander: “No solamente hemos ofrecido nuestro expertise psicológico, médico o rehabilitador. También hemos ayudado a muchas personas que demandaban urgencia por tener una conversación cotidiana que les devolviera unos minutos a la deseada normalidad en estas semanas de confinamiento. Los profesionales, por considerar un aspecto de máxima importancia el estado psicológico en esta situación, no hemos dudado en contribuir a ello. Incluso duplicando en ocasiones el tiempo que solemos dedicarle a los pacientes”.
Otro aspecto relevante fue la proactividad con la que se implementó el protocolo de seguridad en el Hospital Mutua Montañesa, lo que garantizó mantener alejado al virus de las instalaciones. Gracias a ello, se siguieron atendiendo las urgencias y accidentes laborales, que, en menor medida, continuaban sucediendo, además de la realización de 154 intervenciones quirúrgicas y operaciones de primera necesidad.
Mutua Montañesa da por finalizado este periodo de máximo esfuerzo por parte de los profesionales sanitarios con buenas sensaciones, por el reflejo del excelente trabajo reflejado tanto en primera línea como en términos de planificación y seguridad.
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