¿Eres de las personas que, nada más levantarte, lo primero que haces el coger el móvil y revisar las redes sociales, el correo electrónico, asuntos de trabajo…? No, no eres ningún bicho raro, es algo que hace una amplia mayoría de las personas pero no por extendido significa que sea correcto. Es más bien lo contrario. Y es que existe una enfermedad llamada adicción digital. Y es que tal y como reconoce la OMS (Organización Mundial de la Salud), la adicción digital está considerada como enfermedad y es por ello que debemos luchar contra ella y tratar de evitarla antes de que nos cause males mayores.
La necesidad de desconexión en nuestra vida cotidiana es real e imperativa en un mundo en el que la tecnología cada vez está más extendida. Por aportar algunos datos, nada menos que el el 75% de niños de 12 años tiene móvil, porcentaje que, según el INE, ascienda al 90% cuando hablamos de adolescentes mayores de 14 años. Yendo más allá, en tres de cada diez hogares españoles los niños de entre 7 y 12 años utilizan algún tipo de tablet o dispositivo electrónico. Si los más pequeños ya rondan estas cifras solo hay que imaginar lo que sucede cuando hablamos de jóvenes y adultos.
Pero esta adicción no solo afecta a nuestra vida cotidiana, sino que también influye, y mucho, en el trabajo. Como decía al principio, una amplia mayoría de la población revisa su correo electrónico de empresa fuera del horario laboral y también un gran número de trabajadores se ven ‘obligados’ contestar WhatsApp, mensajes o a entrar en el sistema de su empresa para realizar cualquier tipo de actividad o función cuando no están dentro de su jornada laboral. Las facilidades y la accesibilidad que tiene un teléfono móvil o cualquier otro dispositivo portátil ‘incitan’ a ello.
Por ello, la necesidad de desconexión es real. Y no solo la necesidad sino también el derecho. Hace unos meses, el pasado 9 de octubre de 2018, entraba en vigor el Artículo 88 de la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos). En ella se reconoce el derecho a la desconexión digital en el ámbito laboral. A grandes rasgos, la normativa dice: «Los trabajadores y los empleados públicos tendrán derecho a la desconexión digital a fin de garantizar, fuera del tiempo de trabajo legal o convencionalmente establecido, el respeto de su tiempo de descanso, permisos y vacaciones, así como de su intimidad personal y familiar».
El descanso, la salud y la conciliación, favorecidos
Eso sí, el artículo también reconoce que, más allá del derecho en sí, el empleador está obligado a formar y sensibilizar a sus trabajadores para procurar un uso razonable de las herramientas tecnológicas, consiguiendo así numerosos beneficios para sus empleados:
- Mayor descanso y desconexión laboral lo que repercute en la salud y el bienestar de los trabajadores
- Fomento de la conciliación de la vida laboral y personal, implicando un incremento de la felicidad de los empleados
- Cuidado de la salud y prevención de enfermedades mentales y psicológicas, daños en el sistema nervioso, problemas oculares o auditivos, obesidad, dolencias musculares u óseos…
- Mejora en la calidad del sueño y el descanso
La desconexión digital favorece la productividad y la retención de talento
Como se puede observar, estos cuatro puntos recogen los numerosos beneficios que produce la desconexión digital repercuten directamente en la salud, el bienestar y la felicidad de los trabajadores lo que implica una mejora en la productividad laboral y también permite a las empresas incrementar sus opciones de retener el talento. Ganancias son múltiples y atañen tanto a empleados como a empleadores.
Es por ello que las empresas deben garantizar la desconexión digital de sus empleados a la par que formarles y concienciarles de la importancia que esta tiene. Por ello, GoodHabitz, líder europeo en e-learning corporativo con más de 600 clientes de la talla de KLM, Ford, Danone, Deloitte, PWC, Vodafone, Altamira, Sanitas o Adecco, ha lanzado el primer curso sobre Detox digital para empresas en el que se trata de formar y fomentar la desconexión digital de los empleados: claves, consejos, trucos, beneficios… todo esto y mucho más en el curso de Detox digitial que cuenta con la aportación de Marc Masip, psicólogo experto en adicción a las nuevas tecnologías y creador del programa Desconecta.
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