El estudio se ha realizado a 820.938 trabajadores con edad comprendida entre 18 y 65 años, procedentes de distintos lugares de España y de todos los sectores económicos, a los que se han realizado reconocimientos laborales con objetivo de controlar y prevenir riesgos para la salud en el desempeño de sus actividades laborales.
Según este estudio, el 82 por ciento de los trabajadores que se sometieron a exámenes durante el pasado año han declarado dormir profundamente, si bien este porcentaje es mayor entre los hombres (85%) que entre las mujeres (75%).
Además, un 11 por ciento de los encuestados han afirmado tener un sueño ligero y, de este porcentaje, un 15,5 por ciento de las mujeres afirman despertarse con más facilidad que los hombres (7,5 por ciento).
En este sentido, un 7 por ciento de los participantes han declarado que tiene un sueño variable. «La calidad del sueño depende de factores personales e internos, como la facilidad que tiene uno mismo de despertarse por las noches, y de factores externos, como las altas temperaturas del verano que impiden dormir correctamente», ha informado a Europa Press el director de medicina del trabajo de Premap, José Manuel Gómez López.
Según el estudio, el 93 por ciento de los trabajadores ha declarado que concilia el sueño con facilidad y, en este aspecto, los hombres superan a las mujeres en cuanto a la rapidez con que se duermen.
CONSECUENCIAS DE DESCANSAR MAL POR LAS NOCHES
La encuesta ha revelado que un 10 por ciento de mujeres tiene problemas para dormir y esto podría tener consecuencias en el entorno laboral, ya que un descanso inadecuado podría generar problemas en la seguridad de los trabajadores.
«Dormir mal por las noches podría afectar al rendimiento y capacidad intelectual de la persona. El peligro depende del trabajo que se desempeñe, ya que, por ejemplo, un conductor de autobús tiene más peligro que una persona que trabaja en una oficina, ya que podría quedarse dormido al volante y provocar un accidente por haber descansado mal», ha detallado el doctor.
Además, ha proseguido, toda persona necesita un mínimo de horas de sueño diarias, aunque este número puede variar según la actividad realizada durante el día, la calidad del sueño y otros factores que hacen que cada uno tenga necesidades distintas.
RECOMENDACIONES PARA CONCILIAR EL SUEÑO
Por todo ello, se recomienda usar adecuadamente, si se tiene, el aire acondicionado para regular el dormitorio a una temperatura adecuada y poder conciliar el sueño con más facilidad en verano.
Además, el doctor aconseja evitar el estrés en el trabajo o en el ámbito personal e intentar resolverlo en la medida de lo posible. Asimismo, si se padece alguna enfermedad, es necesario consultar con el médico para prevenir cualquier riesgo laboral.
«La OMS recomienda dormir entre seis y ocho horas, ya que la falta de descanso puede producir trastornos en el funcionamiento general del organismo y afectar al rendimiento», ha concluido el experto.
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