La consejera para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, y el presidente de Caja de Jaén, José Antonio Arcos, han suscrito recientemente el protocolo del Programa ‘Optima’ con el objetivo de profundizar en la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres a través de una estrategia de optimización de la gestión de los recursos humanos.
Navarro mostró su agradecimiento a la entidad bancaria por adherirse a este proyecto, gracias al cual se realizará un «diagnóstico» de Caja de Jaén para detectar qué áreas o factores se deben potenciar para propiciar la igualdad de condiciones entre ambos sexos.
«No se trata de quitar hombres, sino de compartir», subrayó la consejera para la Igualdad y Bienestar Social, quien indicó que el objetivo último es conseguir llegar al día en el que deje de ser noticia que una mujer ocupa un cargo de responsabilidad en alguna empresa.
Por su parte, Arcos Moya destacó que el 40 por ciento de la plantilla de Caja de Jaén son mujeres, al tiempo que detalló que en la última comisión ejecutiva de la entidad bancaria se decretó el ascenso de 20 personas, de los que diez son mujeres. Asimismo, subrayó que se van a hacer fijos a diez personas, de los que siete también son mujeres.
En este sentido, el presidente de Caja de Jaén concretó que por oposición entrarán 14 personas, de los que sólo seis son hombres, mientras que en la bolsa de trabajo hay 12 mujeres de un total de 18 personas.
No obstante, Arcos Moya aseveró que la representación de mujeres en cargos de responsabilidad de la entidad bancaria sólo asciende a un 15 por ciento, si bien sostuvo que las «expectativas son favorables», ya que «el camino de la promoción está abierto».
La consejera para la Igualdad y Bienestar Social manifestó que desde que surgió en 1995 el programa ‘Optima’ en Andalucía se han realizado 36 de planes de igualdad, «son muchas las empresas andaluzas y sólo 36 tienen un plan», según apostilló, por lo que destacó el compromiso de Caja de Jaén por que las trabajadoras de la entidad dispongan de este plan.
«El problema está identificado, hay leyes específicas que desarrollan el principio y prohíben cualquier discriminación», recalcó Navarro, si bien insistió en que «sin compromisos no serviría de nada», ya que este problema «no es fácil», concluyó.
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