La campaña electrónica 'Tira del hilo', ideada por Intermón Oxfam, anima a los ciudadanos a enviar una misiva al presidente de la Federación Española de Empresas de Confección (FEDECON) para evitar que se produzcan situaciones de explotación laboral en el sector.
En la carta se destaca que "FEDECON es una entidad que agrupa a las empresas españolas del sector textil y confección con el objetivo de velar por sus intereses socio económicos. Sin embargo, al margen de algunas declaraciones formales, la organización no ha incorporado de manera efectiva la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) como un ámbito que incide directamente en la marcha y futuro de las empresas de confección, además de influir decisivamente en el derecho que tienen sus trabajadores y trabajadoras de cualquier lugar del mundo de disfrutar de una vida digna". "Con ello su organización está desaprovechando la oportunidad de que las empresas del sector capturen el valor añadido que se genera al producir la ropa de manera responsable, y quedan además expuestas a riesgos de marca que dañan aquello que FEDECON pretende preservar: su valor económico", prosigue el texto.
Por esto, la misiva exige a FEDECON que facilite "los criterios y procedimientos necesarios para que toda la industria española de la confección lleve a cabo una gestión socialmente responsable de sus negocios, también de la parte que se realiza fuera de España". La ONG recomienda a la federación liderar e impulsar el desarrollo de un 'Plan de implantación de RSC' para formar, sensibilizar y asesorar en RSC, así como desarrollar un código de conducta sectorial basado en el cumplimiento de la normativa internacional y en cuya verificación participen los grupos interesados.
Intermón recuerda que más del 40% de la ropa de marcas españolas se confecciona en países donde no hay garantías de respeto a los derechos laborales básicos. Aunque algunas empresas españolas han comenzado a tomar medidas contra la explotación laboral, el sector debe trabajar "en su conjunto para regular la forma en que las empresas deslocalizan su producción en países en desarrollo", aseguran desde la ONG.
La responsable de responsabilidad social corporativa de Intermón Oxfam, Isabel Tamarit, señaló que "el sector textil español está formado por pequeñas y medianas empresas que necesitan el apoyo y liderazgo de su patronal para avanzar de una forma clara hacia el respeto de los derechos laborales básicos de las trabajadoras que hacen las prendas que nos ponemos a diario".
"Este proceso debe ser abierto y transparente, de manera que el consumidor pueda saber dónde y en qué condiciones se ha confeccionado la prenda, para lo cual es fundamental establecer protocolos que faciliten el seguimiento y verificación", indica Tamarit.
En todo el mundo, cerca del 70% de las prendas de vestir se confeccionan en países en vías de desarrollo donde la mujer es la mayor perjudicada. De hecho, tres de cada cinco mujeres trabajan en el sector sin prestaciones sociales ni contratos de trabajo. Como consecuencia, la gran mayoría no tiene derecho a asociarse, son obligadas a trabajar hasta 48 horas seguidas y reciben salarios muy bajos.
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