Dos bodegas de la D.O Ribera del Duero se han acogido al proyecto “Contrata” que reconoce y distingue a los vinos que han sido elaborados con mano de obra inmigrante contratada de forma regular y justa.
La Red Acoge, impulsora del proyecto, ha escogido esta denominación vitivinícola porque cuenta con una alta tasa de empleo de mano de obra extranjera, sobre todo durante las campañas de vendimia.
La responsable de la Red Acoge en Burgos, Manuela Garrido, destacó que este es primer paso para introducir entre las bodegas el concepto de responsabilidad social, y que en 2007 se volverá a poner en marcha una campaña de concienciación de similares características que contará con el respaldo del Ayuntamiento de Aranda de Duero.
Así, Garrido espera que el año próximo la cifra de bodegas se incremente, ya que las explotaciones vitivinícolas habrán podido recibir más información sobre este proyecto que “fideliza y aumenta clientes”.
La concejala de Acción Social, Teresa Hontoria, afirmó se trata de una iniciativa importante ya que es “deseable” que todos los inmigrantes contratados por las bodegas se encuentren en condiciones legales.
Hontoria destacó que en estos momentos los inmigrantes conforman el 10% de la población del municipio, y que muchos de ellos trabajan en el sector de la agricultura.
El Instituto Great Place to Work en España es el organismo encargado de certificar que el proceso productivo del vino se ha realizado con prácticas justas de contratación.
Así, las bodegas que logren la certificación podrán incluir en la contraetiqueta de las botellas un sello con el lema “Contrata. Acceso justo al mercado laboral” que recompensa a las empresas que dignifican las condiciones laborales de inmigrantes.
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