Expertos en conciliación alertan de que vivimos en una sociedad estresada y de que la vida no es sólo trabajo

"Vivimos en una sociedad estresada, donde tenemos muy poco tiempo para perdernos por las calles de nuestra ciudad y observar lo que nos rodea", señaló  ayer el socio director de la consultora Urrainfancia y ex Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Javier Urra, que participó en una Conferencia sobre la Optimización del Tiempo en la Escuela de Negocios IDE-CESEM.

Durante el encuentro, celebrado en el marco del ciclo sobre Horarios Racionales que impulsa la Asociación para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE) presidida por Ignacio Buqueras, Urra señaló que "es fundamental saber utilizar el tiempo y darse cuenta de que las prioridades de un anciano son diferentes a las de un joven o un ejecutivo".

En palabras de Buqueras, "la clave es darse cuenta de que la vida no es sólo trabajo". "Hay vida después del trabajo, desde luego, y estos 22 encuentros que estamos organizando en diferentes entidades colaboradoras pretenden explicar la forma en que puede racionalizar el tiempo la sociedad española", matizó.

Según explicó Buqueras, el contenido de estos debates se recogerá en la edición de un libro que verá la luz el próximo otoño con un resumen de todos estas reuniones empresariales. La finalidad es llevar a la sociedad española la idea de que "hay que utilizar el tiempo de otra manera", porque, "como dijo Gandhi en alguna ocasión, cada minuto es irrepetible, tanto para el más pobre como para el ciudadano más rico".

Por su parte, el director general de IDE-CESEM, Javier Zardoya, recalcó la necesidad de impulsar la conciliación de la vida laboral y personal como uno de los elementos "claves" para que puedan racionalizarse los horarios.

"Desde este punto de vista, nuestra entidad ya trabaja en diversos programas de conciliación, pioneros en su género, tanto en colaboración con la Fundación '+ Familia' como con los Cursos de Escuela de Padres para Profesionales que pondremos en marcha en breve en colaboración con Urraifancia", explicó Zardoya.

CLASES DE 'TIEMPO'

Durante su intervención, Urra explicó cómo los diferentes grupos sociales gestionan el tiempo. En el caso de los ancianos, salvo excepciones, siempre se habla de la expresión "están matando el tiempo". Esto significa que se hacen cosas de forma rutinaria más o menos por inercia.

Un grupo similar son los que el conferenciante denominó "usurpadores del tiempo" "personas que por diversas circunstancias van de víctimas, lo ven todo negativo y son el contrapeso a las personas positivas que hay que buscar en esta vida para que tenga alicientes". "Es fundamental que tengamos tiempo para meditar y vivir en soledad cuando nos apetezca", apuntó.

En este sentido, Urra recalcó que "pese a que se vive mejor en nuestra sociedad porque hay muchos y notables avances que permiten una mejor calidad de vida, quizás exista en nuestra sociedad un mayor sentimiento de soledad". "El estres es evidente: las prisas nos acompañan siempre desde que nos levantamos y en muchas ocasiones no sabemos priorizar la importancia de las cosas", explicó Urra.

A su juicio, "realmente hay poco tiempo que podemos llamar útil cuando disfrutar de las cosas triviales como ver un amanecer o perderse por las calles de la ciudad son prácticas que se están perdiendo por el ritmo frenético en que se vive".

Otro de los temas que destacó Urra en su intervención fueron los cambios que se han producido en el concepto tradicional de familia. "En los últimos veinte años el modelo que conocemos convive ya con otros totalmente diferente; donde se puede encontrar la familia monoparental o incluso parejas del mismo sexo", explicó.

En este nuevo contexto familiar "el ser humano debe tener la capacidad de generar nuevos amigos, incluso pese a que sean muy diferentes en su forma de ser y poder desarrollar sin miedo el sentido del humor, una cualidad que es, sin lugar a dudas síntoma de inteligencia", remarcó.

Como remedio a este panorama, el ex Defensor del Menor de la CAM señaló que el ser humano "necesita marcarse objetivos y priorizar". "Es evidente que cada persona tiene sus biorritmos y su forma de ver la vida, pero con disciplina y unos objetivos claros se puede llegar a aspirar a tener tiempo para uno mismo", concluyó.