El Corte Inglés integrará en su plantilla a más de un centenar de personas con discapacidad en los próximos dos años, gracias al convenio ‘Inserta’, firmado ayer entre la cadena de distribución y la Fundación ONCE.
En virtud de este acuerdo, El Corte Inglés promoverá la integración laboral indirecta de este colectivo a través de la compra de bienes o servicios en Centros Especiales de Empleo del ámbito de la ONCE y su fundación.
Este convenio también prevé la posibilidad de realizar buenas prácticas en materia de accesibilidad a bienes y servicios dentro del ámbito de actividad de El Corte Inglés, teniendo presentes los principios que propugnan el diseño "para todos" y la accesibilidad global.
La firma de este convenio se enmarca dentro del Programa Operativo ‘Lucha contra la discriminación’, llevado a cabo por la Fundación ONCE con la cofinanciación del Fondo Social Europeo, y por el que se pretende incrementar la empleabilidad y la integración laboral de las personas con discapacidad.
Según el presidente de la Fundación, Alberto Durán, "la empresa es un elemento de normalización muy importante porque es quien crea empleo, y quien ofrece productos y servicios". Por este motivo, en su opinión, con la integración de este colectivo en una empresa tan "característica" en España "va a ayudar a que la discapacidad se haga más visible para el conjunto de la sociedad".
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