ALDI acaba de publicar la Memoria de Sostenibilidad 2019 que sitúa al cliente en el centro de la estrategia de sostenibilidadde la compañía y destaca los compromisos asumidos en materia de nutrición, envases y cambio climático. Así, la compañía asume el compromiso de hacer más sostenible toda su cadena de valor y favorecer el consumo responsable con el objetivo de facilitar a los clientes una compra responsable, segura y con conciencia.
La estrategia de ALDI en materia de Responsabilidad Social Corporativa que recoge la Memoria destaca, como principales compromisos, el cuidado en el origen y la calidad de los productos, con un surtido cada vez más amplio de productos sostenibles; la apuesta por envases sostenibles y reciclables en sus artículos de marca propia; y la utilización de tecnología avanzada para reducir el consumo de energía en los supermercados y minimizar el impacto del cambio climático.
Compromiso con los productos: calidad y responsabilidad
ALDI promueve un estilo de vida saludable y sostenible, permitiendo que una gran parte de la sociedad consuma de manera asequible y responsable. Con este fin, ofrece a sus clientes una gama cada vez más amplia de productos saludables y sostenibles y promueve la transparencia a través de un etiquetado claro del producto mediante el uso de certificaciones y etiquetas de sostenibilidad reconocidos.
Según se refleja en la Memoria, la compañía apoya de forma decidida a los productores locales, y cuenta ya con un 80% de proveedores de origen nacional, a lo que suma otras acciones, como favorecer rutas de transporte más cortas para ahorrar recursos y reducir así el impacto negativo sobre el medio ambiente.
Respecto a los alimentos, continúa trabajando en la mejora de su composición nutricional, reduciendo el contenido de azúcares, sal y grasas, y aumentando la fibra, de acuerdo con la estrategia NAOS (Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad) impulsada por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social de España.
En esta línea, apuesta, cada vez más, por productos ecológicos, veganos y vegetarianos. De hecho, ALDI cuenta con 34 productos con certificado Welfair de Bienestar Animal y, además, el 28,2% del pescado, el 97,4% del cacao, el 73,4% del café y el 50,5% del té de ALDI cuentan con certificados de sostenibilidad.
La cadena de supermercados también ha conseguido avances desde 2019 con la incorporación de materias primas de origen sostenible en sus productos no alimentarios. Por ejemplo, el 42,6% de los textiles de ALDI están elaborados con algodón sostenible.
Compromiso con los envases: reducción, reutilización y reciclaje
Como parte de la cadena de valor en el sector retail, ALDI contribuye al desarrollo de envases más sostenibles y al establecimiento de una economía circular funcional para los envases. El objetivo es implementar sistemáticamente mejoras en los envases de marca propia de acuerdo con los principios de reducir, reutilizar y reciclar.
En 2019, la compañía ahorró más de 1.100 toneladas de plástico virgen y casi 1 tonelada de aluminio al eliminar de su surtido productos de plástico de un solo uso, utilizando plástico reciclado en botellas, bolsas de basura y al rediseñar productos y envases, como, por ejemplo: bastoncillos de algodón, productos de limpieza e higiene rellenables.
Con perspectiva a 2025, la cadena de supermercados contempla que el 100% de los envases sean reciclables, compostables o reutilizables, y que se reduzca un 20% el plástico en los envases y productos.
Compromiso con la eficiencia: ahorro de energía para mitigar el cambio climático
Otro de los compromisos de la compañía se enfoca en la utilización de tecnología avanzada para minimizar el consumo de energía en todas las tiendas de ALDI y mitigar así el cambio climático. Además, apuesta por el uso de energía de origen renovable, la generación de electricidad propia en los tejados de sus tiendas y en la compra exclusiva de energía verde. Así, en España, la compañía ha logrado reducir el 50% las emisiones de gases de efecto invernadero en relación a 2015.
ALDI centra sus esfuerzos en este ámbito en el ahorro de energía, de combustibles y en el uso de refrigerantes más sostenibles. Para ello, aplica distintas medidas de eficiencia energética, como la instalación de iluminación LED en todos sus establecimientos desde 2016, y de los sistemas fotovoltaicos con los que cuentan ya 581 de los establecimientos de la compañía en Europa (42 en España), un 39% más que el año anterior.
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