Desde el inicio de la crisis por el COVID-19, FUNDACIÓN JUAN XXIII RONCALLI, que lleva más de 50 años trabajando por la inclusión social y laboral de personas con discapacidad intelectual, puso en marcha una serie de actividades de voluntariado online a las que ya se han sumado empresas como IBERCAJA, COCA-COLA, IBERDROLA, SAGE o SAS, entre otras.
Estas acciones tienen el objetivo de prestar apoyo a aquellos que más lo necesitan y que más han podido verse afectados por esta situación extraordinaria, además de mantener la relación habitual con las empresas que apoyan esta causa y que colaboran organizando actividades entre sus trabajadores de la mano de la Fundación. A día de hoy, a pesar de la vuelta escalonada a la normalidad, estas acciones se siguen potenciando. El motivo, además de seguir siendo prudentes y mantener las normas impuestas para la protección de la salud de todos, es que se ha demostrado lo eficaces que son para reforzar el compromiso con la inclusión de todas las personas.
Ahora más que nunca se hace imprescindible reinventarse y apostar por actividades de voluntariado que se encuentren al alcance de todos y que tengan el objetivo de apoyar a las personas más vulnerables. Aunque estas iniciativas fueron en un principio puestas en marcha pensando en los usuarios de la Fundación, los trabajadores de su Centro Especial de Empleo y diferentes empresas con las que colabora habitualmente, muchas otras compañías se han unido de una manera rápida y sencilla: tan solo es necesario desear apoyar y compartir experiencias con personas con discapacidad y contar con un dispositivo electrónico con conexión a internet y una plataforma digital.
Acompañamiento telefónico para conocer de primera mano el día a día de una persona con discapacidad intelectual; charlas motivacionales de la mano de Roberto Chinchilla, actor protagonista de la película ‘Campeones’ y embajador de la Fundación; retos de elaboración creativa de repostería o manualidades; creación literaria de manera grupal; talleres de lectura o reciclaje textil son tan solo algunos ejemplos de actividades que han comenzado a desarrollarse durante la pandemia para hacer frente a los posibles efectos psicológicos negativos en todas las personas.
Aranzazu De Miguel, Gerente de RSC y Eventos de FUNDACIÓN JUAN XXIII RONCALLI, ha declarado: “Estamos orgullosos de haber sido capaces de dar respuesta a la demanda de una sociedad que se ha volcado en ayudar a los demás. Queremos agradecer a todas las empresas su confianza en nosotros a la hora de canalizar su acción social y a los voluntarios por su implicación y su compromiso con nuestra misión”.
La puesta de marcha de acciones de este tipo, como voluntariados online, demuestra cómo las entidades de carácter social se están adaptando para llegar cada vez a más personas. Así es el ejemplo de FUNDACIÓN JUAN XXIII RONCALLI, que durante la crisis ha acelerado su proceso de digitalización para ampliar su capacidad de apoyo y expandir sus servicios.
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