Dicho Acuerdo, alcanzado en 2015, estableció el objetivo de frenar el calentamiento global, limitando a 1,5°C el aumento de temperatura de la Tierra, lo que reduciría considerablemente los riesgos y el impacto del cambio climático.
Meliá Hotels International ha asumido un rol protagonista en la lucha contra el cambio climático dentro del sector turístico español, siendo la primera hotelera inscrita en el Registro de Huella de Carbono, Compensación y Proyectos de Absorción de CO2 del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Tras llevar más de una década trabajando en su programa de eficiencia y gestión de recursos, el grupo ha reducido sus emisiones de C02 un promedio de casi un 13% por hotel desde 2007 y, además, su sistema de gestión energética ha conseguido la certificación ISO 50.001.
Tal y como recoge su Política Medioambiental, Meliá Hotels International establece sus compromisos con el medioambiente a través de iniciativas para mitigar el impacto de su actividad, preservar la biodiversidad, impulsar la gestión eficiente de recursos y de residuos y sensibilizar a todos sus stakeholders. En este último ámbito, con su adhesión a la comunidad #PorElClima, la compañía contribuirá a impulsar la conciencia medioambiental entre sus diferentes públicos con la difusión de acciones que ayuden a frenar el cambio climático.
Según afirma Gabriel Escarrer, Vicepresidente y Consejero Delegado de Meliá Hotels International, “como empresa líder, queremos contribuir al desarrollo de una industria turística más sostenible, porque somos conscientes de que el sector hotelero es especialmente sensible al entorno en el que desarrolla su actividad y porque tenemos la oportunidad de concienciar a millones de clientes y promover experiencias hoteleras que sean responsables”.
Según el Informe Global de Riesgos (Global Risks Report), 4 de los 5 riesgos que tendrán un mayor impacto en los próximos diez años están relacionados con el cambio climático, como el clima extremo, la pérdida de biodiversidad o los desastres naturales. Desde 1990, las emisiones de CO2 se han incrementado globalmente en más de un 46%. Los océanos absorben el 30% del dióxido de carbono producido por el hombre, amortiguando el impacto sobre el calentamiento global, pero la contaminación por plásticos se está convirtiendo también en un problema global para los océanos.
Los comentarios están cerrados.