ATREVIA, consultora global de comunicación nº 1 en España, y Corporate Excellence han presentado hoy el informe De la Comunicación a la rendición de cuentas en la sede de la fundación en Madrid. Una nueva metodología de RSC y Sostenibilidad que ofrece a las compañías herramientas sofisticadas de transparencia, escucha, co-creación de compromisos y evaluación de resultados.
Desde que la Ley de Sociedades de Capital (2014) estableciera que el Consejo de Administración tiene la responsabilidad indelegable sobre la política de Responsabilidad Social Corporativa, se ha producido un cambio sustancial en esta función. Lo que antes se explicaba con un ejercicio sofisticado de comunicación, ahora requiere un proceso claro para rendir cuentas ante terceros sobre las metas y objetivos definidos por cada organización y de su nivel de cumplimiento.
Alberto Andreu Pinillos, profesor de la Universidad de Navarra y senior advisor de ATREVIA, Rocio Pérez de Sevilla, directora del Área de Comunicación de Crisis y Posicionamiento Corporativo de ATREVIA y Ángel Alloza, CEO de Corporate Excellence, han sido los encargados de presentar el nuevo modelo a los asistentes. Y es que en el modelo actual de cambio social, de desconfianza en las instituciones tradicionales y en las empresas, con un consumidor y ciudadano que exige transparencia, consistencia y escucha, las organizaciones tienen el reto de pasar de ser percibidas como parte del problema a pasar a ser parte de la solución y a conectar con la sociedad, transformando ese escepticismo en confianza.
Alberto Andreu Pinillos ha comenzado la charla poniendo sobre la mesa la necesidad de buscar la colaboración de todos los agentes en las políticas de RSC de las empresas si lo que se persigue es pasar de comunicar a rendir cuentas y, de esta forma, “ayudar a que las áreas de comunicación, RSC, Relaciones Institucionales o asuntos públicos, puedan ayudar a la Compañía y a su Consejo de Administracion en su responsabilidad indelegable en materia de RSC”. La clave es co-crear compromisos concretos, comunicarlos y, sobre todo, rendir cuentas del nivel de consecución.
Rocio Pérez de Sevilla, por su parte, ha destacado la importancia de comunicar de forma sencilla y atractiva elaborando relatos que lleguen a los embajadores internos de la compañía, sus principales prescriptores. Para ello han de dejarse atrás modelos tradicionales más conservadores donde primaba un lenguaje lleno de tecnicismos y comenzar a construir mensajes disruptivos sacando el máximo partido a todos los canales de los que disponen las compañías. Es necesario perder el miedo a hacer autocrítica y explicar por qué se han o no se han alcanzado los compromisos adquiridos.
A su vez, Ángel Alloza ha expresado que esta metodología se presenta como una guía práctica para facilitar a las organizaciones avanzar en la gestión de la RSC y la sostenibilidad, reinventando las herramientas y los procesos de cumplimiento y rendición de cuentas utilizados hasta ahora e impulsando un nuevo modelo para la puesta en valor de la contribución positiva de las organizaciones.
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