Las “Canastas Solidarias Citroën C4 Cactus”, que se han celebrado esta mañana en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) del Consejo Superior de Deportes de Madrid, coincidiendo con el comienzo de la Euroliga de Baloncesto con el patrocinio de Citroën, han finalizado con un rotundo éxito, gracias a la iniciativa solidaria puesta en marcha por la marca automovilística a beneficio de la Fundación Bobath y su proyecto de construcción de una residencia para niños con discapacidad cerebral.
La competición benéfica entre rostros conocidos del mundo del espectáculo y del deporte de la canasta, principal atractivo del evento, contó con la participación de la modelo Malena Costa, que mostró orgullosa su anillo de compromiso y confirmó su boda con el futbolista Mario Suárez, actualmente jugador de la Fiorentina italiana.
Junto a ella, o, mejor dicho, contra ella, jugó uno de los rostros de moda del panorama artístico actual, el actor y modelo, Nicolás Coronado, a quien actualmente vemos en la exitosa serie de televisión “Águila Roja” (TVE), donde da vida a un joven carpintero, Manuel.
Hijo de Paola Dominguín y José Coronado, considerado uno de nuestros galanes, Nicolás demostró que es un joven al que le gusta involucrarse en las causas solidarias: “Después de esta experiencia, que ha sido muy divertida, animo a que todo el mundo se apunte a participar en eventos así, porque se puede ayudar a muchos niños y a gente que lo necesita”
Pau Ribas (FC Barcelona), Fabien Causier (Laboral Kutxa Vitoria Gasteiz), Fran Vázquez (Unicaja Málaga), y Jeffery Taylor (Real Madrid), representantes de los cuatro equipos españoles que participan este año en la máxima competición europea, la Euroliga de baloncesto, estuvieron entusiasmados durante el acto.
La emocionante y divertida competición fue presidida por Miguel Cardenal, presidente del Consejo Superior de Deportes y amenizada por la ex baloncestista Amaya Valdemoro, la jugadora más laureada de la historia del baloncesto español femenino.
Este encuentro ha conseguido recaudar 4.000 euros, que fueron entregados a la Fundación Bobath, que tiene como fin fundacional la asistencia integral, educativa y de tratamiento a personas de cualquier edad que padecen parálisis cerebral. Concretamente, se destinarán a su proyecto de construcción de una residencia para niños con discapacidad cerebral.
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