El Ballet Nacional de España interpretará la coreografía de su director Antonio Najarro “Suite Sevilla” en la gala que tendrá lugar el martes 16 de diciembre, a las 20.00 horas, en los Teatros del Canal de Madrid. Será una actuación solidaria a favor de niños y niñas con discapacidad intelectual organizada por la Fundación Gmp a beneficio de FEAPS Madrid, el patrocinio de CBRE y la colaboración del Inaem, Teatros del Canal y del diario La Razón.
El 100% de la recaudación se destinará a facilitar tratamientos de atención temprana a niños y niñas con discapacidad intelectual, o con riesgo de desarrollarla, de familias de escasos recursos económicos. Mediante esta colaboración, la Fundación Gmp, que ya viene apoyando los tratamientos de atención temprana de 65 familias, podrá incrementar su ayuda a FEAPS Madrid, para que otras familias con necesidades económicas, y que en este momento carezcan de recurso público para el tratamiento, puedan proporcionar esta atención temprana a sus hijos.
Las entradas para acudir a la representación del Ballet Nacional de España, pueden adquirirse por los medios habituales de Teatros de Canal, bien en taquilla o en su página web http://www.teatroscanal.com/espectaculo/suite-sevilla-ballet-nacional-espana/. La organización de esta gala solidaria también ha habilitado una “fila cero” para dar la oportunidad de colaborar con este proyecto a cualquier persona. Fila Cero: ES90 0049 1803 53 2310439803.
FEAPS Madrid ha hecho un llamamiento animando a los madrileños a asistir a la magnífica representación de Suite Sevilla. Para su director, Javier Luengo, acudir el próximo 16 de diciembre a los Teatros de Canal es una ocasión muy especial para poder ver al Ballet Nacional al tiempo que se colabora con un proyecto solidario.
La Atención Temprana, que incluye tratamientos de logopedia, estimulación, fisioterapia, intervención psicológica, psicomotricidad y otras terapias complementarias que han de ser impartidas por especialistas, es de vital importancia en los primeros años de vida de un niño ya que reduce el impacto de la discapacidad intelectual o de cualquier déficit asociado a ésta, haciendo que posteriormente puedan tener una vida lo más normalizada posible.
A día de hoy existen muchas familias con dificultades económicas, no pueden acceder a este tratamiento para sus hijos que es costoso, sobre todo teniendo en cuenta que las familias de personas con discapacidad intelectual ya de por sí soportan un sobreesfuerzo económico anual que puede oscilar entre los 18.000 y los 30.000 euros.
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