El delegado provincial de la Consejería de Empleo en Sevilla, Antonio Rivas, se comprometió ayer con los trabajadores de la fábrica de la marca Donuts en Sevilla para mediar con el Grupo Panrico y «buscar soluciones» a un posible cierre de la planta, aseguró ayer el comité de empresa.
En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité, José María Díaz, aseguró que los representantes de los trabajadores salieron «satisfechos» de la entrevista con el delegado, quien mostró su intención de «reunirse con la dirección del grupo la próxima semana y ayudar».
Los empleados del centro sevillano expusieron al delegado sus «inquietudes ante un posible cierre de la fábrica», y puntualizó que la dirección no lo ha confirmado ante «la oposición de los trabajadores».
Díaz recalcó que la fábrica de Donuts que opera en Sevilla es «el tercer centro más importante» del grupo, y aseguró que Andalucía es la comunidad autónoma que «más rentabilidad» ofrece a Panrico. «El tejido industrial en Sevilla no se puede perder», sentenció.
«Salimos satisfechos porque es lo que buscábamos, la implicación de las Administraciones Públicas», indicó Díaz, que expresó su confianza en que «la intervención de la Junta ayude bastante en la solución de este problema».
Además, anunció que la plantilla «continuará con las movilizaciones», organizando concentraciones ante la fábrica, caravanas de vehículos y recogidas de firmas, y apuntó que ya llevan recabadas más de 5.000.
Por su parte, el consejero de Empleo, Antonio Fernández, recordó que «aún la empresa no ha dicho que va a cerrar, sino que está dispuesta a hablar de otras vías distintas al cierre», por lo que consideró que «sentarse con una administración no es el foro adecuado».
Fernández valoró que «en 48 horas se ha ido de una situación de cierre», temida por los trabajadores, «a una posición ya conocida de la empresa de negociar otras cosas algo distintas».
No obstante, garantizó que su departamento trabajará para que «el centro de trabajo de Sevilla siga siendo una realidad», del mismo modo que, según dijo, ha hecho con otros conflictos laborales, como el de Cortefiel en Málaga.
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