La dirección de la empresa Azucareras Reunidas de Jaén presentará mañana el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) al comité de empresa, según informó a Europa Press el presidente de este comité, José Luis Barrios.
Según Barrios, el documento del ERE se presentará mañana al comité de empresa y el viernes se entregará al Gobierno central y a la Junta de Andalucía. «A partir de mañana tendremos 15 días para proponer las alegaciones que consideremos oportunas», puntualizó el representante de los empleados de la empresa en la estación de Linares-Baeza (Jaén).
En este sentido, Barrios aseguró que las alegaciones al ERE que presentará el comité de empresa girarán en torno a la «necesidad de buscar una alternativa que favorezca a los trabajadores de la fábrica después de que esta cierre».
Por otro lado, destacó la reunión que se ha celebrado esta mañana con el alcalde de Linares y de otras localidades como Lupión, Begíjar, Rus, Canena y Linares-Baeza. Así, Barrios subrayó que se «ha acordado presentar una moción de censura en varios ayuntamientos de Jaén en la que se hará un llamamiento a la necesidad de paliar los efectos negativos provocados por el cierre de la empresa».
La empresa Azucareras Reunidas de Jaén anunció el pasado 13 de marzo a los trabajadores de la planta que esta campaña será la última que permanezca abierta como consecuencia de la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del azúcar.
El presidente del comité de empresa advirtió entonces que unos 240 puestos de trabajo «están en el aire» a causa de esta situación, por lo que han solicitado a la dirección de la fábrica un plan industrial con el fin de que les indique qué reconversaciones tiene previsto realizar.
Barrios indicó además que la planta de biodiésel albergará posiblemente a unos 20 trabajadores y agregó que la dirección de la factoría estaba a la espera de que el Gobierno le confirme si puede realizar en esa misma planta una línea de producción para envasar terrones de azúcar, en la que también trabajarían unas 20 personas.
Así las cosas, el presidente del comité de empresa concretó que una vez concluya la próxima campaña a finales del mes de julio la empresa cerrará sus puertas. Ante estos hechos, aseguró que están estudiando convocar algún tipo de movilización, si bien indicó que las protestas «tendrían que haber comenzado antes en Bruselas», donde se negoció la reforma del sector de la remolacha.
Días después, el representante de los trabajadores explicó que, aunque el Gobierno central no lo había confirmado por escrito, «no habrá problemas en que permanezca la línea de envasado tras el desmantelamiento de la fábrica», después de la reunión que celebró ayer la dirección de la factoría con el Gobierno para analizar este proyecto.
Según Barrios, si «se mantiene esta parte de la fábrica pueden salvarse cerca de 25 puestos de trabajo que, unidos a los 20 ó 25 de la planta de biodiésel, supondrán cerca de 50 puestos de trabajo».
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