Los trabajadores de la empresa Autotex se manifestaron hoy frente a la sede de la Junta General del Principado para exigir al Gobierno regional que asuma un compromiso de futuro con los trabajadores y, junto a la empresa, presente un plan de viabilidad de la misma.
Los sindicatos convocantes de la movilización, las federaciones SOMA-FIA-UGT y FITEQA-CCOO, afirmaron que "el Principado debe involucrarse y hacer todo lo necesario para mantener los 207 puestos de trabajo de la factoría".
Poco antes de que en la Junta General diese comienzo el debate sobre la Orientación Política de esta legislatura, los trabajadores de Autotex reclamaron el apoyo y compromiso del presidente del Principado mostrando pegatinas y pancartas en las que se pedía un plan de futuro y se mostraba la oposición al cierre de la fábrica de airbags.
Tanto el secretario general de la federación de FITECA CCOO, lfredo lvarez como Armando Fernández Natal, secretario organización SOMA-FIA-UGT, insistieron en que van a seguir dialogando con el Principado y la empresa en busca de una solución. Así se refirieron a la necesidad de buscar nuevos inversores que garanticen el futuro de la factoría y no descartaron la posibilidad de que el Principado entre a formar parte del accionariado.
"Llevamos ya un tiempo de incertidumbre y la empresa ni siquiera nos manifiesta cuando tiene pensado cerrar", dijo Fernández Natal que aseguró que la información de la que disponen los trabajadores es "poco transparente".
Natal afirmó que Autotex llegó al Principado como una empresa de referencia para hacer de Asturias una región con diversificación del tejido industrial y tras recibir una importante cantidad de subvenciones dice que se va. "Por eso la administración regional debe involucrarse y tomar cartas en el asunto y le exigimos que junto a la empresa presenten un plan de viabilidad en el que se busque garantía de estabilidad y empleo y en el que remita los activos patrimoniales de la empresa", dijo.
Alfredo Suárez fue más crítico aún con la actitud de la empresa y destacó que la misma ha recibido subvenciones por valor de 3 millones de euros de fondos mineros y otros 2,7 millones de otro tipo de ayudas. "En julio reciben la última subvención y en agosto ya se reúnen con la consejería para transmitir su intención de cerrar. Creo que puede haber un afán especulativo por parte de la empresa", resaltó.
En este sentido el secretario de FITEQA-CCOO afirmó que "la situación es complicada porque se trata de un conflicto atípico, ya que no es normal que una multinacional se instale y a los seis años se vaya". Suárez añadió además que "no hay voluntad clara de la empresa de buscar salidas que no sean otras que el cierre de la planta con indemnizaciones ridículas" y se refirió al "alto grado de responsabilidad de las administraciones".
La de hoy es la primera jornada de huelga de los trabajadores, un paro que según los sindicatos está siendo secundado por casi el 100% de la plantilla
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