El productor aluminio realizará los despidos como parte de un plan de reestructuración para ahorrar 125 millones de dólares anuales antes de impuestos.
La compañía anunció que cerrará plantas en Europa y Estados Unidos. "En los primeros nueve meses del año, hemos generado más ganancias que en cualquier año completo de nuestra historia", afirmó el presidente y consejero delegado de la compañía, Alain Belda.
Sin embargo, "con el propósito de avanzar, necesitamos adoptar los pasos difíciles pero necesarios para reestructurar la compañía y seguir logrando la máxima rentabilidad", añadió el directivo.
Los despidos involucran al 5% de la fuerza laboral total del grupo que tiene 129.000 empleados en 44 países. Así, 4.800 puestos eliminados corresponderán al sector automotriz y de componentes para automóviles.
En principio, recaerán los despidos en la planta AFL Seixal de Portugal y en AFL de vehículos ligeros en Estados Unidos y en México. Junto a esto, la reestructuración de láminas de envase provocará el cierre de su fábrica de Swansea en Reino Unido y la eliminación de 320 empleos.
Otros 370 empleos serán eliminados en Estados Unidos y en Europa a causa de la remodelación de la actividad de moldeado de materiales, utilizada para la industria aeroespacial, del automóvil y de productos de mercado.
Además, casi 500 trabajadores de la actividad de empaquetados serán despedidos, mientras que la actividad de metales primarios y aluminio quedará recortada en 330 posiciones con el objetivo de "mejorar la posición de la compañía en la curva de costos global".
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