La Unión Europea (UE) pondrá 1.000 millones de euros a disposición de Bélgica en los próximos siete años en forma de fondos estructurales, después de la decisión de Volkswagen de suspender la fabricación de automóviles Golf en su planta de Bruselas,, como parte de un programa de reestructuración.
Esto fue anunciado hoy por el comisionado de la UE para el empleo, Vladimir Spidla.
"Para los próximos siete años, alrededor de 1.000 millones de euros estarán a disposición de Bélgica y veremos cómo utilizarlos con mayor eficacia", dijo Spidla después de una junta con las autoridades regionales belgas.
"Escribiré al presidente de Volkswagen instándolo a asegurar un diálogo social efectivo a través de esta operación de reestructuración", agregó.
La "Fuerza de Trabajo para la Reestructuración" de la Comisión Europea (CE) se reunirá este viernes y ha hecho arreglos para ver a sus contrapartes belgas el 30 de noviembre con objeto de discutir actividades específicas para los trabajadores.
El brazo ejecutivo de la UE dijo que está "perfectamente consciente" de los efectos devastadores de un despido laboral a gran escala en Bélgica.
Spidla agregó que los fondos provendrán primeramente del Fondo Social Europeo (FSE) y proveerán a los trabajadores de VW apoyo para su recapacitación y asistencia a los que deseen abrir un nuevo negocio.
VW dijo este martes que dejará de fabricar el Golf en su planta de Bruselas como parte de un programa de reestructuración y transferirá su producción a dos plantas en Alemania.
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