Como temían diversos portavoces de la plantilla, la Dirección de Trabajo, en Madrid, ha aprobado el expediente de extinción de contratos de la empresa Primayor Foods que afectará a 157 trabajadores. En su gran mayoría, los empleos destruidos corresponden al centro de Zaragoza. Según las condiciones impuestas por la autoridad laboral a la empresa en la resolución del expediente, la cuantía de las indemnizaciones a los trabajadores, y el número de jubilados anticipadamente será inferior a la que se fijaba un preacuerdo al que se llegó entre las partes, aunque finalmente se desechó por discrepancias relacionadas con las garantías de cobro.
La resolución recoge el pago de indemnizaciones de 30 días de pago por año trabajado con un tope de 15 mensualidades (en el pacto alcanzado entre los portavoces de la plantilla y Dirección, refrendado por los trabajadores, este mismo mes, el límite máximo se situaba en los 18 meses).
Además, la número de prejubilados desciende sensiblemente, al pasar de 48 personas a 29. Ello se debe a que Trabajo establece en 55 años edad mínima a la que los empleados de Primayor accederán a la medida, a pesar de que el preaacuerdo establecía los 53 años.
Los portavoces de la empresa dijeron "lamentar que después de cinco meses de intensas negociaciones y ofrecimientos, haya finalizado el periodo de consultas sin acuerdo". Recordaron que Trabajo "considera probadas las causas expuestas por la compañía" para presentar el ERE. Respecto al cierre de su instalación de Zaragoza, ya aprobado, aseguraron que éste "será progresivo", al igual que las salidas de los empleados.
El principal sindicato representado en la empresa, CCOO, recordó su postura contraria a lo que consideran un cierre patronal injustificado y sus portavoces anunciaron que la decisión de la Administración -"que esperábamos más valiente", apuntaron- será recurrida a través de un proceso contencioso administrativo. Añadieron que "exploran" la opción de acudir a un proceso penal.
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