Los trabajadores de las empresas auxiliares de Renault siguen viviendo su particular calvario como consecuencia de las restricciones de empleo provocadas por las bajas ventas del modelo Modus que fabrica en exclusiva mundial la factoría de Montaje de Valladolid. La empresa Ramel, adjudicataria del servicio de limpieza, ha comunicado a los 84 trabajadores de la subcontrata ISS Facilite Services, que el 1 de febrero estarán en la calle, un anuncio que ha sembrado la preocupación entre las familias afectadas y ha puesto en alerta a los sindicatos para evitar llegar a este extremo.
Ramel ha renovado el contrato de prestación de servicios con la multinacional del rombo por otros tres años, hasta el 2010, pero con una reducción del 41% en la prestación de servicios. Esta situación le ha llevado a presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) para un centenar de trabajadores de su plantilla. Ramel ofreció a ISS la posibilidad de volver a prestar el servicio a partir del 1 de febrero, aunque tendría que reducir también plantilla.
ISS Facilite Services, que tiene adjudicado el servicio de limpieza de Renault en Palencia, lo rechazó y anunció que se marchaba. La ley establece que la empresa adjudicataria del servicio, Ramel, está obligada a subrogarse en los contratos laborales de los 84 trabajadores que han venido prestando este servicio.
Un problema legal
Pero la empresa tiene su propias dificultades con un expediente de regulación para un centenar de sus trabajadores y resultaría, cuando menos contradictorio, subrogar o asumir a los empleados de la subcontrata, aunque la ley le obligue a ello.
De ahí que los sindicatos analicen la situación jurídica, se trataría de un problema legal, y tratan de negociar una salida para los afectados o, cuando menos, un acuerdo para salvar parte de la plantilla. Si pierden el empleo el día 1, los trabajadores podrían empezar a presentar demandas por despido contra Ramel.
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