Casi el 100% de los empleados de Renault de la fábrica de Villamuriel de Cerrato que cuentan entre 59 y 60 años, y que pueden optar a las bajas incentivadas establecidas en el expediente de regulación de empleo, abandonarán la empresa en las próximas semanas, al haberse acogido a este sistema. En la planta de Villamuriel, unos 250 empleados cuentan con la edad exigida para acogerse a las bajas.
A la espera de los datos definitivos -el plazo de solicitud concluyó ayer- fuentes sindicales avanzaron que prácticamente la mayoría de los afectados se ha decantado por esta posibilidad. La empresa les pagará una indemnización aproximada de 60.000 euros líquidos y durante dos años se acogerán al desemplo para pasar después a la jubilación.
Las bajas incentivadas permitirán rebajar el número de trabajadores afectados por el expediente de regulación de empleo rotativo que ya ha comenzado a aplicarse en la empresa, junto con la supresión del tercer turno de trabajo, que se ha eliminado para un periodo de año y medio.
Por otra parte, el Ministerio de Industria y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras coincidieron ayer en señalar que el acuerdo alcanzado para Renault y la industria auxiliar debe garantizar el futuro de la multinacional en España y de sus proveedores.
El director general de Desarrollo Industrial, Jesús Candil, recibió ayer en Madrid a represenlos sindicatos, mayoritarios en la empresa. «Ambas partes consideran que las dificultades coyunturales de Renault para mantener unos niveles de producción acordes con sus posibilidades industriales han sido consecuencia de la caída de las ventas y de la situación actual de la demanda», se destaca en un comunicado del Ministerio.
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