El BBVA afronta la cita anual con sus accionistas en un ambiente de optimismo internacional. El banco mantiene la línea de mejora en sus cifras económicas que ha caracterizado los últimos ejercicios. Pero mientras el pasado año el presidente Francisco González se presentaba ante la masa social de la entidad con las manos vacías, en esta ocasión viene precedido de dos golpes de éxito. Uno en Asia y otro en los Estados Unidos. El banco tiene previsto prejubilar este año a 500 trabajadores, frente a los 1.800 del pasado ejercicio, aseguran fuentes sindicales.
El consejo del BBVA vuelve al encuentro con los accionistas del banco en el Palacio de Euskalduna de Bilbao, pero con una sensible diferencia respecto al año pasado. En la junta de 2006, el banco acababa de salir del fracaso en la compra de la BNL italiana, torpedeado por la aseguradora Unipol y el Banco de Italia. Por primera vez en la historia, la junta anual se celebra un viernes y no en sábado.
Adquisiciones
Hoy, el presidente se presenta ante sus accionistas exultante tras la adquisición del banco estadounidense Compass y la constitución del vigésimo grupo bancario de los EEUU. La entidad presenta también ante sus propietarios el acuerdo de adquisición del 5% del Citic Bank y del 15% del Citic International Financial Holdings (CIFH), que data de noviembre pasado, en una pugna en la que se impuso a su tradicional competidor español, el Santander. Dos operaciones en las que ha invertido casi 1.000 millones de euros.
Los tentáculos desplegados por el BBVA a ambos lados del Pacífico parecen haber calmado en las últimas semanas todos los rumores que los especuladores de la bolsa lanzaban día sí, día no, sobre la posibilidad de que una gran entidad financiera extranjera pudiera lanzarle una OPA y absorberlo.
Filtraciones
La junta ya ha empezado a caldearse, aunque no se sabe hacia qué dirección. Según la filtración de una de las reuniones entre el departamento de Recursos Humanos y los sindicatos, el banco tiene la intención de prejubilar a 500 trabajadores, una cifra muy inferior a los 1.800 del pasado año, equivalentes al 6% de la plantilla total de la entidad financiera.
El secretario general de la UGT en el BBVA, Sebastián Moreno, ha escrito una carta al presidente de la entidad, Francisco González, en la que solicita una paga para los trabajadores, en metálico o acciones, como premio por el 150 aniversario de la entidad, y una serie de peticiones de negociación que van desde la cuestión de la homologación de los beneficios sociales de los trabajadores del BBV y los de argentaria, hasta la participación sindical en la cuestión de los horarios, pasando por la revisión de las aportaciones a fondos de pensiones, que llevan congeladas desde 2000.
Estas cuestiones de orden laboral no empañan los buenos registros del BBVA el pasado año. El beneficio de la entidad ascendió a los 4,736 millones de euros, con un incremento del 24,4% respecto al ejercicio precedente. Además, en el periodo comprendido entre los años 2002 y 2006, los activos de la entidad han crecido el 10,2% de tasa anual media, el beneficio atribuido ha aumentado el 27,8% de media anual y el beneficio por acción, el 25,5%. El negocio ha registrado importantes alzas el pasado año, con avance del 18% en préstamos hipotecarios, del 23% en crédito al consumo y tarjetas del 19% en la banca de negocios y del 34% en depósitos.
El banco presentará a los accionistas unos ratios envidiables. La rentabilidad sobre fondos propios (ROE) se ha situado en el 37,6% en 2006, seis décimas más que en el ejercicio precedente. La tasa de eficiencia ha mejorado hasta el 42,6% desde el 46,7% de 2005. En el campo de la solvencia, el grupo la elevó del 11,5% al 12% el pasado año, con alzas de una décima en el Tier I, hasta el 7,8%, y de cuatro décimas en el Tier II, que se sitúa en el nivel del 4,2%.
El BBVA mejora también en lo que se refiere a la morosidad. El banco redujo la tasa de mora sobre la cartera crediticia del 0,94 al 0,83% en el último año. La tasa de cobertura de los fallidos se ha incrementado desde el 252,5% de 2005 hasta el 272,8% del pasado año.
En cualquier caso, esta no va a ser una cualidad que pueda presentar el presidente como diferenciadora del BBVA respecto a sus competidores en el pasado ejercicio. Los dos caballos de batalla que va a presentar el presidente ante sus accionistas son sus éxitos en Estados Unidos y en China.
La junta
El máximo órgano del BBVA procederá a dar el visto bueno al consejero independiente Rafael Bermejo, ex directivo del Banco Popular. Esta decisión y la ratificación de la fundación BBVA para las Microfinanzas, dotada con 200 millones de euros, constituirán los principales puntos del día de la junta. También se aprobará un incremento del 20% en el dividendo de la entidad, que se sitúa en 0,637 euros por acción.
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