Mildred-Pauni iniciará la semana próxima un expediente de extinción de empleo que afectará a los 410 trabajadores de la repostera oscense. No obstante, la dirección de la empresa espera poder reconvertir la extinción, en una suspensión temporal de empleo. Mientras tanto, continúan las negociaciones con posibles compradores de la empresa.
La dirección de Mildred comunicó ayer al comité de empresa el inicio inmediato del expediente de regulación de empleo de extinción, ya que la repostera ha entrado en fase de liquidación tras haber alegado días atrás en el juzgado su imposibilidad de hacer frente a los pagos. Ahora se espera que esta situación, que afecta a 410 puestos de trabajo, se pueda reconvertir en una suspensión temporal de empleo, en la que no toda la plantilla se vería afectada, según explicó Luis Périz, de la dirección de empresa.
Desde el Comité de Empresa, María José Berdié, declaró a los medios de la comunicación, que de todas las posibilidades, esta es la menos mala, "porque han planteado que posiblemente sería una reconversión en vistas a las negociaciones con posibles compradores". Añadió que "el Comité lo h aceptado bastante bien dentro de lo que conlleva".
Esta tarde, los trabajadores se volverán a concentrar. Mientras tanto, continúan las negociaciones para una posible compra. Una de las empresas que se ha interesado en la adquisición de Mildred, dará su respuesta dentro de unos días.
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