UGT, CCOO y CGT, los tres sindicatos presentes en el comité de empresa de Gearbox, filial de cajas de cambio de Seat, se adhirieron ayer al acuerdo firmado para reducir en unas 1.600 personas la plantilla del grupo Seat en tres años a través de medidas voluntarias, sobre todo prejubilaciones.
De los cerca de 140 afiliados de la CGT en la planta de Gearbox en El Prat de Llobregat (Barcelona), han participado en la consulta más de 80, de los que sólo uno ha votado en contra del pacto y otros tres se han abstenido, según han informado a Efe fuentes de esta organización.
Esta votación supone un preludio de lo que pasará presumiblemente entre los afiliados de la CGT en el resto de centros de trabajo del grupo: la planta de la Zona Franca, el centro de recambios, la fábrica de Martorell (Barcelona) y el centro técnico.
Fuentes de la CGT en la fábrica de la Zona Franca ya han avanzado que se espera que una mayoría de los cerca de 250 afiliados que tiene dicha organización en esta planta apoyen el acuerdo.
En Gearbox trabajan unas 1.200 personas, de las cuales 69 tienen 58 años o más y, por tanto, constituyen el colectivo que se podrá acoger a las prejubilaciones a partir de los 60 años a partir del próximo martes.
Gran parte de estos empleados tienen previsto abandonar la compañía, según han señalado las mismas fuentes sindicales, que también prevén alguna baja incentivada y más de una excedencia en esta planta del grupo.
El acuerdo, que el consorcio alemán quería que abarcase a todo el grupo Seat, supone un problema para la dirección de Gearbox, una compañía que estima aumentar su ritmo de fabricación de cajas de cambio en los próximos meses y que dispone de una plantilla que se ajusta a sus necesidades productivas.
Por este motivo, existe el compromiso verbal de que todas las bajas que se produzcan en Gearbox serán cubiertas por otro trabajador que responda al perfil establecido.
Según las mismas fuentes, la dirección de la filial de cajas de cambio de Seat ha pedido a los sindicatos un esfuerzo para tratar de convencer a los empleados que puedan estar interesados en dejar su puesto de trabajo a través de bajas incentivadas, excedencias de entre tres y cinco años, y períodos sabáticos para que permanezcan en la compañía.
En el acuerdo del ajuste, al que ha tenido acceso Efe, se detalla que la efectividad de las prejubilaciones "podrá demorarse por la empresa por el tiempo necesario en los casos en que sea preciso para garantizar el buen funcionamiento del servicio".
En cuanto a las bajas incentivadas, su concesión "será en todo caso discrecional para la dirección de la empresa, en atención a las necesidades de plantilla, a la función desempañada por el trabajador, a la profesionalidad del mismo y al buen funcionamiento del servicio, informando en todos los casos a la comisión de seguimiento".
En el preámbulo del documento firmado en la madrugada de ayer por UGT y CCOO, la dirección de Seat justifica estas medidas en base a que el plan de viabilidad presentado a raíz del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de diciembre de 2005 "ha sido insuficiente para restablecer la rentabilidad de la empresa".
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