Cáritas Diocesana de Huesca ha difundido un comunicado de solidaridad con los trabajadores de la empresa Mildred-Pauni en el que expresa "la necesidad de que prime el interés de los trabajadores de la empresa y sus familias tanto en las negociaciones que puedan darse todavía para una posible compra de la empresa como en las del Expediente de Regulación de Empleo (ERE)".
En este segundo caso, señala la nota, "es necesario obrar con justicia con la plantilla de la empresa mediante unas compensaciones dignas por los despidos y ofreciéndoles la información necesaria para evitar incertidumbres o esperas injustificadas".
Cáritas Huesca solicita de las Administraciones públicas "que adopten todas las medidas posibles para paliar la situación precaria de los trabajadores y trabajadoras, y ayudarles efectivamente en su búsqueda de empleo". Asimismo, considera necesaria la implicación de los empresarios oscenses en esta tarea.
Cáritas Diocesana reitera su preocupación por la suerte de estas familias y manifiesta su solidaridad con ellas, además de mostrar su apoyo a la acampada de trabajadores ante las instalaciones de la factoría y a cuantas medidas adopte la plantilla en esta línea.
Finalmente, Cáritas Huesca pone sus servicios a disposición de los trabajadores para la ayuda que puedan requerir.
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