El fabricante francés PSA Peugeot Citroen reducirá empleos en los países del oeste de Europa, anunció ayer su presidente, Christian Streiff, que no precisó cifras ni naciones afectadas, aunque aseguró que "no se prevé" por el momento ningún cierre de fábricas.
Streiff indicó que el "empleo se va a ver afectado por el objetivo del 30 por ciento de reducción de gastos fijos" de aquí a 2010 y que el grupo se "inscribe en una lógica de efectivos decrecientes en Europa del Oeste, hasta que logremos alcanzar el mejor nivel de competitividad en Europa".
En rueda de prensa para presentar el plan estratégico de PSA, Streiff fijó como objetivo hasta 2010 recobrar el crecimiento y la rentabilidad, superar los 4 millones de vehículos vendidos (700.000 más que en 2006), consolidar su liderazgo en el automóvil ecológico y convertirse en el grupo más competitivo de Europa en 2015.
Para ser más rentable, el grupo apunta a un margen operativo de entre el 5,5 por ciento y el 6% de la facturación en 2010 y, después, un crecimiento continuo hasta alcanzar un margen de entre el 6% y el 7% en 2015.
PSA Peugeot Citroen tiene la ambición de constituir en 2015 un grupo con una base europea sólida, con un crecimiento regular y rentable, ampliamente internacionalizado y que figure entre los primeros en todas sus actividades.
Siete meses después de su llegada a la presidencia del grupo, Streiff precisó que su plan estratégico pasa por una ofensiva de la oferta en Europa y la "extensión de la base industrial y de compras en los países emergentes".
En total, el grupo lanzará en todos sus mercados 53 nuevos modelos en cuatro años, entre 2007 y 2010, de los cuáles 29 en Europa (18 renovaciones de modelos existentes y 5 nuevos) y doce diferentes en los países del Mercado Común del Sur (Mercosur) y otros tantos en China.
Streiff proyecta una ofensiva comercial europea que permita vender 300.000 vehículos suplementarios en 2010.
Su ofensiva internacional pasa por vender 400.000 vehículos suplementarios en 2010 fuera de Europa.
En el Mercosur, el grupo prevé llegar a comercializar 400.000 vehículos, duplicando así su actividad.
Sólo en Brasil, el grupo se ha fijado el objetivo de formar parte de los cuatro primeros en la industria automotriz y para ello prevé reforzar la red de sus dos marcas, crear rápidamente capacidades industriales suplementarias, aumentar la proporción de sus compras locales y reforzar su I D localmente.
En Argentina, PSA ambiciona convertirse en el "líder indiscutible", dijo Streiff, quien espera multiplicar por cinco sus ventas en China para alcanzar ventas por un millón de vehículos.
Con esta perspectiva, el grupo, que está proyectando con su socio Dongfeng Motor una nueva implantación industrial y está realizando un estudio de viabilidad de una "joint venture" (empresa de riesgos compartidos) con el constructor chino Hafei, que podría permitir al grupo abrir una tercera implantación en el sur del país.
En Rusia, el grupo se ha fijado como meta vender 100.000 vehículos en 2010 para alcanzar poco después los 300.000 coches.
Los comentarios están cerrados.