El comité de empresa de la planta General Motors en Figueruelas (Zaragoza) considera insuficientes las propuestas realizadas por la dirección de la empresa en la negociación de la recolocación de los 227 trabajadores afectados por la externalización del Taller Central, Energía y Tratamiento de Aguas Residuales.
En una reunión mantenida el jueves con el comité, la dirección ha "empezado" a realizar propuestas concretas, siguiendo el patrón de las tres vías de solución planteado hace una semana. Estas tres vías serían la recolocación en la empresa proveedora (Veolia-Dalkia) bajo determinadas condiciones, la baja incentivada y la recolocación en otro sector de la planta de Figueruelas.
Según señaló a Europa Press el presidente del Comité de Empresa, Juan Arcéiz, una vez realizadas las propuestas "los diferentes sindicatos que forman el comité las analizarán" y posteriormente harán una "puesta en común". Aunque, después de la reunión de hoy ha quedado patente que a los sindicatos les han parecido "insuficientes", antes de realizar una valoración concreta sobre cada una de las propuestas".
La primera de las vías supone realizar el traspaso a la compañía proveedora Dalkia (grupo Veolia), en condiciones más favorables para el trabajador de las exigidas por la ley. La dirección ha propuesto unas garantías personales de 10 años -hasta 2017- a los trabajadores que accedan al traspaso.
Estas garantías supondrían mantener las mismas condiciones salariales, con los mismos incrementos que se produzcan en la plantilla de GM y conservar la antigüedad.
También mantendrían las mismas condiciones laborales en cuanto a horas trabajadas, flexibilidad laboral, plan industrial de trabajo, vacaciones, permisos, contratos de relevo, planes de separación o el programa de complemento de baja.
Tendrán marcados el mismo número máximo de días festivos laborables y la misma gratificación por ellos, en días o sueldo. La empresa no se compromete solamente a mantener las condiciones sino también a aplicar a los trabajadores las mejoras que se constituyan en la planta de GM.
De la misma manera, los trabajadores contratados por la empresa proveedora, recibirán las mismas primas que los trabajadores de GM pero fusionadas en un única prima al final del año.
También, durante estos diez años, los trabajadores podrían retornar a GM en el proveedor cesara o si una nueva empresa que asumiera ese servicio no mantuviera las mismas condiciones.
Según Arcéiz, esta propuesta es la que prefiere la dirección de GM y la que fomenta. Sin entrar a valorar detenidamente las propuestas, Arcéiz observó que se queda corta en el tiempo de garantía. "Uno de los objetivos del comité es que todos los trabajadores estén cubiertos por las garantías", señaló el presidente del comité, quien añadió que, con el compromiso de diez años, los trabajadores que ahora tienen menos de 50 se encontrarán al final de su carrera sin garantías laborales.
La segunda vía que propone la dirección de la empresa es la baja voluntaria incentivada. Los trabajadores, menores de 55 años afectados por la externalización que decidan aceptar la baja cobrarán dos mes es por año trabajado con un máximo de 24 mensualidades. Esta baja también se hace extensiva al resto del colectivo de mantenimiento, pero la empresa sólo estará obligado a aceptar las bajas provenientes de las tres plantas externalizadas.
La tercera vía es la recolocación en otro sector de la planta de Figueruelas de GM España, en este caso, la dirección ha propuesto priorizar la recolocación en otro sector de mantenimiento dentro de la categoría profesional del trabajador, y en el caso de no ser posible, trasladarlo a otra área productiva.
En el plazo de una o dos semanas el comité trasmitirá su respuesta a la dirección, según ha señalado Arcéiz, quien agregó que su sindicato (UGT) celebra próximamente una asamblea general de afiliados, fecha que aprovecharán para valorar estas propuestas en una asamblea con los afectados por la externalización.
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