La dirección de Mercedes y el comité de empresa han cerrado esta semana un preacuerdo para cerrar su planta en Barcelona, en el barrio de Bon Pastor, según han informado fuentes de los representantes de los trabajadores.
Mercedes había planteado el cierre de su factoría en Bon Pastor, lo que afectaba a 420 puestos de empleos directos y 100 indirectos, en un marco de cierres en el sector de componentes de la automoción en Catalunya.
El preacuerdo tiene cuatro pilares, un pacto de prejubilaciones para 110 personas, quince recolocaciones en la planta de Sant Esteve de Sesrovires (Barcelona) en la firma de recambio Schlenker pero manteniéndose como plantilla de Mercedes, la recolocación de 270 personas en una nueva filial de Mercedes y Estampaciones Sabadell que se denominará Construcciones Metálicas y que tendrá su fábrica en Esparraguera y un programa de bajas incentivadas.
El programa de bajas contempla unas condiciones de 52 días por año trabajado con un límite de 42 mensualidades, más 1.000 euros por año trabajado más una cantidad fija por persona de otros 6.000 euros.
El preacuerdo sólo será válido si la asamblea de trabajadores lo revalida el jueves de la semana que viene, con lo que en este momento todo el pacto sigue pendiente de este trámite fundamental.
La fabrica de Mercedes en el Bon Pastor se encuentra en una zona en la que ha habido una fuerte actividad de promoción inmobiliaria para vivienda en los últimos años, y fuentes del sector inmobiliario consultadas por Efe estiman que el grupo alemán podría obtener un total de 400 millones de euros por los 96.000 metros cuadrados que la factoría ocupa en la capital catalana.
El acuerdo cerrado esta semana ha llegado después de un largo calendario de paros y movilizaciones y la dirección de Daimler-Mercedes ha cifrado la pérdida de producción provocada por las doce huelgas convocadas hasta el momento por los sindicatos en 5.600 vehículos, además de afectar a la factoría que este grupo tiene en Vitoria.
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