El fabricante sueco de equipos de telecomunicaciones Ericsson recortará 4.000 empleos tras reducir el beneficio en 2007 hasta 21.800 millones de coronas suecas (2.303 millones de euros), un 17% menos que en 2006.
El consejero delegado de Ericsson, Carl-Henric Svanberg, pronosticó ayer en Estocolmo un estancamiento del sector para 2008 y ha anunciado que la empresa de telecomunicaciones quiere reducir los gastos anuales hasta en 4.000 millones de coronas suecas (423 millones de euros) hasta 2009.
"Afrontamos tiempos más difíciles y prevemos un crecimiento cero para este año", reconoció Svanberg en la presentación de los resultados de 2007.
A partir de 2009, Ericsson prevé impulsos de grandes pedidos para la modernización de las redes de telefonía móvil en China, si bien ha admitido que existe una competencia creciente de las nuevas compañías chinas de telecomunicaciones que presiona sobre los precios.
La caída de la ganancia el pasado ejercicio se debió al retroceso de la división de redes en mercados como Europa y Norteamérica. "En otoño apreciamos una notable erosión del margen de beneficio en la división de redes", ha indicado Svanberg.
La senda de Nokia
Ericsson, que tiene 74.000 empleados tras haber reducido la plantilla a la mitad entre finales de 2000 y comienzos de 2004, quiere recortar ahora 4.000 puestos de trabajo, de ellos 1.000 en Suecia.
La facturación subió el pasado año un 4%, hasta 187.800 millones de coronas suecas (19.852 millones de euros), en comparación con el ejercicio anterior.
La empresa sueca ha señalado que el crecimiento del mercado de redes móviles se ralentizó el pasado año y que las ventas en el último trimestre de 2007 estuvieron lastradas por la incertidumbre política en algunos mercados emergentes.
Al igual que Ericsson, el productor de sistemas de comunicaciones Nokia Siemens Networks ya anunció el año pasado que va a recortar 9.000 empleos hasta 2010 de su plantilla total mundial de 60.000 personas.
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