El fabricante estadounidense de cámaras digitales GoPro ha llevado a cabo un recorte de plantilla que afectó al 7% de sus más de 1.500 empleados, después de que su facturación en el cuarto trimestre del año sumara 435 millones de dólares (403 millones de euros), una cifra inferior a las expectativas del consenso de analistas, que apuntaban a más de 510 millones de dólares (472 millones de euros).
«Para alinear mejor los recursos con las iniciativas clave de crecimiento, GoPro ha implementado una reducción de sus plantilla de aproximadamente el 7%», anunció la compañía tras el cierre de la sesión de ayer en Wall Street.
De este modo, GoPro calcula que incurrirá en gastos extraordinarios por reestructuración de entre 5 y 10 millones de dólares (4,6 y 9,2 millones de euros) en el primer trimestre de 2016, «principalmente por el coste de las indemnizaciones por despido».
El fabricante de cámaras digitales, que publicará sus cuentas anuales el próximo 3 de febrero, atribuyó el dato de facturación en el último trimestre del año a unas ventas a nivel minorista «a menor ritmo del esperado», particularmente en la primera mitad del trimestre.
Las acciones de GoPro, que permanecieron suspendidas en el Nasdaq durante buena parte de la sesión de ayer, registraron un desplome del 24,5% en el mercado ‘after-hours’, tras haber llegado a perder un 30% de su valor.
La compañía debutó en Wall Street en junio de 2014 a un precio de 24 dólares por acción, lo que implica una caída del 54% desde su salida a Bolsa.
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