El grupo alimenticio estadounidense Kraft Heinz ha decidido cerrar siete fábricas en Estados Unidos y Canadá como consecuencia de la fusión de ambas empresas, una medida que supondrá la supresión de aproximadamente 2.600 puestos de trabajo, según ha confirmado un portavoz de la empresa a Europa Press.
Kraft Heinz, participada por el fondo brasileño 3G Capital Partners y Berkshire Hathaway, el brazo inversor de Warren Buffet, explica que su decisión de consolidar su proceso de fabricación en su red norteamericana es un paso «crítico» en su plan para eliminar el exceso de capacidad y reducir las redundancias operativas de la nueva compañía fusionada.
«Esto hará que Kraft Heinz sea más competitiva a nivel global y acelerará el crecimiento futuro», afirmó la compañía, que remarcó que ha alcanzado esta «difícil pero necesaria decisión» tras explorar a fondo amplias alternativas y opciones.
En concreto, Kraft Heinz cerrará de forma gradual durante los próximos doce y 24 meses las fábricas de Fullerton (California), San Leandro (California), Federalsburg (Maryland), St. Marys (Ontario), Campbell (Nueva York), Lehigh Valley (Pennsylvania) y Madison (Wisconsin), y trasladará su producción a otras plantas en América del Norte.
Asimismo, también prevé trasladar la producción de su actual planta de Davenport (Iowa) a otra nueva localización en la misma zona y mover parte de su producción de queso desde la fábrica de Champaign (Illinois) a otras de la red para crear allí un centro de excelencia en producción de salsas y productos secos.
Por otro lado, la empresa anuncia su intención de invertir cientos de millones de dólares para mejorar la utilización de sus capacidades y modernizar muchas de sus fábricas con líneas de producción «de última generación».
El vicepresidente senior de Asuntos Empresariales y Corporativos de Kraft Heinz, Michael Mullen, aseguró que se tratará a todos los afectados con «el máximo respeto y dignidad» y contarán con indemnizaciones por despido, servicios de recolocación y otras medidas de apoyo para que encuentren nuevo empleo.
Por otro lado, Kraft Heinz anuncia que en 2016 moverá Oscar Mayer y su negocio de carne en Estados Unidos desde Madison (Wisconsin) a su sede de Chicago, lo que supondrá el traslado de 250 empleos a la zona, que se ofrecerán a los actuales trabajadores de esta división.
Kraf Heinz ya anunció el pasado mes de agosto la supresión de alrededor de 2.500 puestos de trabajo en Estados Unidos y Canadá como consecuencia del proceso de reestructuración de sus actividades tras la fusión de ambas compañías.
Los comentarios están cerrados.